Escondida en el contenedor de un camión que llevaba café de exportación iba una tonelada de cocaína con destino al puerto de Buenaventura, Valle del Cauca, cuando las autoridades hicieron el descubrimiento.
Agentes de la Sijin de la Policía interceptaron al conductor del camión momentos antes de lograr llevar el cargamento, bajo encomienda de una organización narcotraficante no identificada, hasta este importante puerto marítimo.
Las autoridades venían siguiéndole la pista al vehículo y lo tenían marcado como sospechoso de tráfico de drogas. El recelo se confirmó una vez los uniformados inspeccionaron el contenido del contendor.
“Mediante controles técnicos y perfilación de medios de transporte de carga, se logró detener un vehículo tipo camión, marca Chevrolet Kodia, color blanco. Al realizar un registro minucioso se encuentra en su interior una carga de café de tipo exportación que estaba contaminado con 1.000 kilogramos de cocaína”, explicó el Departamento de Policía Valle del Cauca.
El estupefaciente estaba envuelto en bolsas termo selladas, las cuales a su vez estaban cubiertas con papel y plástico para intentar evadir los controles de los caninos antinarcóticos.
Cabe mencionar que los paquetes estaban marcados con el símbolo de Superman y ‘PP1′. Este tipo de referencias son recurrentes en los cargamentos de droga, pues las organizaciones delictivas los usan para distinguir su producto.
La misión del conductor del camión era dejar el cargamento en el puerto de Buenaventura para que luego este tomara su rumbo hacia Barcelona, Madrid.
Las autoridades tasaron en más de 48 millones de euros el valor, en el mercado ilegal, de la tonelada de cocaína encontrada dentro del contenedor.
El conductor del camión, quien tiene antecedentes por hurto que datan del 2002, fue capturado por el delito de tráfico, fabricación y tráfico de estupefacientes, mientras que el cargamento de cocaína y el vehículo fueron dejados dejados a disposición de la Fiscalía General de la Nación.
Otras incautaciones
En tres operaciones adelantadas en el Pacífico colombiano fueron incautados tremendos cargamentos de cocaína avaluados en 110 millones de dólares en el mercado ilegal internacional.
Las incautaciones fueron posibles gracias a tres golpes dados de manera conjunta por la Armada, el Ejército Nacional y la Fiscalía General de la Nación.
Inicialmente, los uniformados ubicaron un depósito en el sector de Punta Ají, zona rural de Buenaventura, Valle del Cauca, donde encontraron 41 costales y 20 paquetes sellados que contenían marihuana, los cuales pertenecerían a la disidencia de las Farc Jaime Martínez. En total fueron hallados 1.558 kilogramos de este estupefaciente y no hubo capturas.
Luego, en aguas del Pacífico, un buque de la Armada detectó una embarcación sospechosa que se desplazaba a alta velocidad, por lo que se inició una persecución que terminó con su detención.
La revisión del vehículo marítimo permitió a las autoridades encontrar un doble fondo, una de las modalidades más usadas para mover estupefacientes en el mar, donde se ocultaban 281 paquetes rectangulares que contenían 149 kilogramos de marihuana y 132 kilogramos de cocaína.
Finalmente, también en el mar, fue interceptada una embarcación sospechosa tripulada por tres hombres. “Durante la inspección fueron hallados 1.502 paquetes rectangulares de marihuana y 468 paquetes rectangulares de cocaína, los cuales arrojaron positivo para 1.503 kilogramos de marihuana y 474 kilogramos de cocaína”, precisó la Armada. Los sujetos que viajaban en la embarcación fueron capturados.
En total, estas tres operaciones dejaron como resultado la incautación de 3,2 toneladas de marihuana y 606 kilos de cocaína. Tanto los cinco sujetos –de nacionalidad colombiana– encontrados en las embarcaciones, como los estupefacientes hallados, quedaron a disposición de los entes competentes.