Soñadora, viajera, idealista y libre. Así se definía la periodista Natalia Castillo, a quien la inseguridad de Bogotá le arrebató la vida justo antes de Navidad y dejó inconclusos montones de sueños y metas por cumplir. La ciudadanía ha manifestado su profundo dolor e indignación. La inseguridad está desbordada y consigo se lleva miles de vidas.
Natalia era asesora de comunicaciones en la oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (UNODC) en Colombia. Era apasionada por su trabajo, le gustaba su país, pero quería más y por eso estaba buscando oportunidades afuera, como lo manifestó en redes sociales un amigo cercano.
“Ella quería irse y seguir estudiando, ella iba en bici para llegar a su trabajo en UNODC; estaba cargada de sueños”, manifestó Carlos Arias, compañero de Castillo.
Su vida se apagó cuando enfrentó la inseguridad de Bogotá. El viernes 24 de diciembre en la madrugada, la joven periodista se encontraba departiendo con unos amigos en un restaurante en el sector de Galerías, localidad de Teusaquillo, cuando decidió salir un momento del establecimiento comercial a hablar por su celular.
En ese momento, Castillo, quien al parecer se encontraba con más personas, fue abordada por un grupo de delincuentes que a sangre fría no solo decidieron hurtar sus pertenencias, sino que también le dispararon con arma de fuego causándole una grave herida que la tuvo entre la vida y la muerte por algunas horas.
La periodista, de inmediato, fue trasladada a la Clínica Palermo, pero lamentablemente sus familiares anunciaron horas más tarde que su vida se esfumó por un acto de delincuencia, inseguridad y constante peligro al que se enfrentan los ciudadanos en Bogotá.
Sus familiares y amigos más cercanos manifestaron su dolor. Arias, su compañero, envió un sentido mensaje en sus redes sociales, sobre todo en contra de la gestión de la alcaldesa Claudia López.
“¡Claudia López, mataron a la peque, Natalia Castillo! ¡Bogotá y su maldita inseguridad la mataron! Ella quería irse y seguir estudiando, ella iba en bici para llegar a su trabajo en UNODC; ella estaba cargada de sueños. Alcaldesa llora, se indigna y ¡le quedó grande la ciudad!”, aseguró.
En ese sentido expresó: “Ella era Natalia Castillo, mi amiga, con la que discutía porque ella era idealista y romántica. Ella suponía que todo podía estar mejor. ¡Ayer a sus 31 años la mataron por robarle el celular!”.
“¡Para ti, @NATYUJUNA! Ayer a la medianoche te asesinaron en Bogotá por robarte el celular. Tenías 31 años y el idealismo propio de tu edad, exacerbado por tu trabajo en @UnidadVictimas y @UNODCColombia. Aún me duele solo pensar que todos tus sueños se truncaron de repente”, dijo su amigo en un duro mensaje.
Una vez se conocieron los hechos, un fiscal de la Unidad de Vida ya asumió la investigación y ordenó la recolección de pruebas documentales y testimoniales para identificar y ubicar a los delincuentes.
Entre las pruebas recolectadas se encuentran los videos de las cámaras de seguridad del establecimiento donde se encontraban, así como las que se encuentran en el sector. Esto con el fin de lograr identificar a los asaltantes, la forma en que llegaron y su ruta de salida.
Igualmente, buscan recolectar las declaraciones de los testigos para reseñar los rasgos de los asaltantes y así realizar la plena identificación.
El comandante encargado de la Policía Metropolitana de Bogotá, general Óscar Gómez, aseguró que ya se conformó un equipo institucional para ubicar a los responsables. Por información que permita su ubicación se ofrece una recompensa de 20 millones de pesos.
Junto con la Fiscalía conformamos un equipo interinstitucional para dar prontamente con estos criminales”, dijo el comandante (e) de la Policía Metropolitana de Bogotá, mayor general Óscar Antonio Gómez Heredia.
Por su parte, la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (UNODC) lamentó y rechazó el asesinato de su colega y compañera: “UNODC lamenta profundamente el fallecimiento de su colega y amiga Natalia Castillo y expresa las más sentidas condolencias a la familia y seres queridos de nuestra estimada compañera. Gracias a toda la comunidad y a las autoridades por sus manifestaciones de solidaridad y empatía”.