La llegada a Colombia del primer vagón del Metro de Bogotá continúa desencadenando comentarios, en especial porque, tiempo atrás, el hoy presidente de la República, Gustavo Petro, quería que fuera subterráneo en lugar de elevado, como lo dejó contratado el exalcalde Enrique Peñalosa.
La tarde de este 25 de octubre, la senadora Paloma Valencia se pronunció acerca de la posibilidad de que el Gobierno nacional, en cabeza de Gustavo Petro, busque que el proyecto finalmente sea subterráneo. Lo hizo después de que La Silla Vacía informara que el presidente de Colombia, al parecer, sostuvo una reunión con el consorcio encargado del proyecto, conformado por China Harbour Engineering y Xi’An Metro.
Conforme con el medio de comunicación en mención, el jefe del Estado colombiano se reunió con el presidente del consorcio, Wu Yu, tres semanas atrás en la Casa de Nariño, aunque Presidencia no se ha expresado al respecto. Al encuentro supuestamente también asistieron el ministro de Transporte, Guillermo Reyes, y la viceministra de infraestructura, María Constanza García.
Por ello, la senadora Paloma Valencia expresó su descontento, incluso planteó que, de ser cierto, el incumplimiento del contrato existente podría afectar la cotización del dólar en Colombia, que este 25 de octubre disminuyó luego de seis jornadas.
“Otro motivo de desconfianza internacional. Parece un anuncio de que incumplirán el contrato de construcción metro firmado con la empresa china. ¿A cómo se va a poner el dólar? Petro tuvo reunión secreta con los chinos del Metro y pidió que sea subterráneo”, trinó.
Valencia, una de las principales figuras de oposición, también expuso la necesidad del Metro de Bogotá, proyecto del que se ha hablado ya hace décadas, aunque nada que ve luz verde. Para ella, no importa si es elevado, incluso trajo a colación cómo opera este sistema de transporte en la capital antioqueña.
“En mejor metro es el que se hace. El metro elevado de Medellín es una maravilla. La segunda línea será subterránea. El presidente Duque dejó garantizadas las vigencias futuras, ¿el presidente Petro va a incumplir? No más caprichos en el gobierno”, publicó en su cuenta en Twitter.
Según Valencia, que también ha expresado su inconformismo con proyectos de ley radicados por el Gobierno, como la reforma tributaria, el presidente “Petro no construye”, sino que “solo está preso de sus caprichos”.
Las alertas desde el Concejo de Bogotá
Este 25 de octubre, Óscar Ramírez, concejal de la capital del país por el partido Centro Democrático, advirtió que de ser ciertas las modificaciones que se han planteado desde el Gobierno, el Metro de Bogotá tendría sobrecostos e importantes retrasos de varios años.
De acuerdo con el concejal, desde el gobierno Petro se está buscando que una parte del trazado de la primera línea del metro sea subterránea.
“Cualquier modificación al contrato significaría sobrecostos millonarios en el proyecto, pero además generaría profundas consecuencias porque los bogotanos seguiríamos sin Metro”, dijo el cabildante.
Y agregó: “El presidente Petro no nos puede devolver a discusiones del año 2017. Hoy, la primera línea del Metro de Bogotá tiene un avance físico del 16 %. Lo que la ciudadanía necesita con urgencia es que el proyecto esté listo en el menor tiempo posible. Si el presidente quiere renegociar los contratos, esto traería retrasos y Bogotá podría pasar esta década sin Metro, pues se correría la fecha de inicio de operaciones, hoy contemplada para el año 2028″.
Ante este panorama, el senador de la República Humberto de la Calle la posibilidad de que se esté planteando modificaciones al Metro de Bogotá, un proyecto que se ha venido necesitando desde décadas atrás.
“¡Por Dios! Rumores sobre frenazo Metro Bogotá. Idas y venidas, vueltas y revueltas. Desde Durán Dussán nos vienen escamoteando ese proyecto”, trinó.