Las armas traumáticas, han reconocido las autoridades a nivel nacional, se convirtieron en un dolor de cabeza. Los delincuentes se están aprovechando de los vacíos que hay en las normas colombianas para cometer delitos sin ser detectados, por esta razón el gobierno indicó que ya está listo el decreto que reglamenta el porte de armas traumáticas.
Según indicó el ministro de Defensa, Diego Molano, luego de la expedición del decreto, la persona que quiera portar un arma traumática deberá solicitar un permiso especial a las fuerzas militares.
De acuerdo con el Ministerio de Defensa, el uso inadecuado de las armas traumáticas en el país ha venido creciendo desde el año 2018 cuando se decomisaron 3.201 elementos de este tipo, mientras que, en el 2019, fueron 3.804, en el 2020, 5.478, este año la cifra es de 6.569, lo que representa un incremento del 105%.
SEMANA reveló en su momento, la alta preocupación que había entre las autoridades de Bogotá, porque habían detectado que los criminales en la ciudad, estaban modificando los cañones de las armas traumáticas para cometer sus delitos y no dejar rastro para que las autoridades pudieran hacer seguimiento.
Indicaron desde la Policía Metropolitana, que las modificaciones a las armas traumáticas no requieren mayor ciencia o complejidad pero si causan gran daño, teniendo en cuenta que se convierte en armas letales.
De acuerdo con el borrador del decreto para poner en cintura el porte de armas traumáticas en el país, este equipara esta clase de elementos con armas de fuego, lo que representa que cuando entre en vigencia la nueva norma, quien quiera portar estos dispositivos deberá obtener un permiso especial de las Fuerzas Militares.
En el proyecto de decreto se establece que Indumil, y el Comando General de las Fuerzas Militares, serán los encargados de recoger las armas traumáticas de defensa personal para realizar el proceso de censo y marcaje de las armas traumáticas.
“Para el marcaje, registro y trámite de tenencia y/o porte de armas traumáticas por parte de la autoridad competente, se establecerá un plazo de 8 meses, prorrogables por ocho meses más”, indicó el borrador de decreto.
Además, indica la nueva directriz, que serán los ciudadanos los que deben entregar las armas traumáticas a las autoridades competentes para que realicen el procedimiento de marcaje con el propósito de que puedan tenerla de manera legal y se eviten sanciones o problemas judiciales.
“A partir de la expedición de este decreto y hasta dentro de los seis meses siguientes a su publicación, las personas naturales o jurídicas propietarias de armas traumáticas que cumplan con las características de armas de guerra, deberán entregarlas al Estado, so pena de su incautación y judicialización. La devolución de hará por medio del departamento de comercio de armas, municiones y explosivos del Comando General de las Fuerzas Militares”, señala el Ministerio de Defensa.
Alertó por último el Ministerio de Defensa, que durante el periodo de pandemia y donde hubo medidas como confinamiento, se evidenció un incremento en las incautaciones de armas traumáticas.
“Las personas naturales o jurídicas que tengan armas traumáticas deberán realizar el marcaje de estas ante la autoridad competente en un plazo de 8 meses contados a partir de que entre en funcionamiento y operación el procedimiento que para ello establezca Indumil. Después de dicho trámite, contarán con 8 meses adicionales para presentar la solicitud de permiso de tenencia y/o porte, ese término se contará a partir del marcaje y registro de cada arma traumática”, establece la cartera de defensa en el proyecto de decreto que sería expedido esta semana, como lo indicó el ministro de Defensa Diego Molano.