La Fiscalía General de la Nación y el Cuerpo Técnico de Investigación CTI lograron la captura de Norman Eduardo Serrano San Miguel, acusado de estafar a más de 18 personas por cerca de 1.600 millones de pesos con falsas promesas de adquirir vehículos mediante la modalidad de prenda bancaria, contó el diario El Nuevo Día.

De acuerdo con el medio, el hombre junto con dos estafadores más ofrecían vehículos a bajo precio, asegurando que tenían prenda bancaria y que sería levantada a los tres o cuatro meses después de la compra.

Las personas estafadas accedían a entregar un dinero para, supuestamente, “pisar el negocio”, pero luego los vendedores se perdían con su dinero y, poco después, las víctimas se enteraban que sus vehículos tenían que ser inmovilizados porque las prendas nunca habían sido levantadas por parte de las entidades crediticias.

De acuerdo con el medio, las víctimas llegaron a Bogotá, Barranquilla, Girardot e Ibagué para cerrar los negocios en lo que luego fueron estafados, sin embargo, fue en la capital del Tolima donde se denunciaron la mayoría de los casos.

Luego de hacer un seguimiento, el CTI logró la captura de Serrano San Miguel en el Conjunto Residencial La Florida I (Ibagué), por una orden judicial emitida el 30 de noviembre de 2021 por el Juzgado Segundo de Control de Garantías.

Además de las pruebas de las víctimas, el CTI pudo determinar que hubo movimientos en las cuentas bancarias de los presuntos estafadores por grandes montos de dinero, depositados por los compradores.

La Fiscalía dictó medida de aseguramiento intramuros contra el sindicado y le imputó 21 delitos, como concierto para delinquir en concurso heterogéneo con estafa agravada en concurso con emisión y transferencia ilegal de cheques, cargos que no aceptó Serrano San Miguel.

¡Ojo! Estafan con promesas de trabajo en Conalvías

Una estafa se está gestando aprovechando la necesidad de decenas de familias con la urgencia de conseguir un trabajo digno. Así le pasó a una mujer y su esposo en la localidad de Bosa, en el sur de Bogotá. Les ofrecieron trabajar en Conalvías, la misma empresa enredada con el escándalo de Odebrecht.

A través de redes sociales y llamadas telefónicas contactan a las víctimas y le ofrecen los beneficios de hacer parte de una asociación con la posibilidad de acceder a contratos laborales en empresas públicas y privadas, a cambio de algunos pagos que hacen los afiliados a través de agencias de giros nacionales.

Las víctimas que contactaron a SEMANA explicaron cómo fueron ubicadas y la forma en que terminaron estafadas. En su relato, las víctimas anticipan que un hombre las contactó por llamadas a su celular y allí les advertían que podrían iniciar un proceso o vinculación que en cuestión de días les dejaría un trabajo formal.

“Me dijo que tenía convenio con Ecopetrol, que se llamaba Conalvías y que tenía un trabajo de paletera, de servicios varios, para el casino, para maestro de construcción y todo eso. Que yo iba a ganar supuestamente un millón ochocientos y mi esposo gana dos millones”, dijo la víctima a SEMANA.

Ese fue el inicio de la estafa, la propuesta de trabajo con grandes empresas del sector de la construcción y obras públicas, pero había más. Era necesario, de acuerdo con la denuncia, que las víctimas se practicaran unos exámenes laborales que, claramente, debían pagar los afectados antes de continuar con el supuesto proceso de vinculación a las empresas.

“Nos dijo que tocaba ir a un consultorio, que tocaba tomarse los exámenes, que le mandara los papeles como el carnet de vacunas, la fotocopia de la cédula, mi hoja de vida… yo le mandé los papeles y esperé como tres días y ya, me dijo que tocaba llevar papeles y tomar otros exámenes ahí al frente de la Macarena”, explican los denunciantes de esta estafa.

Con dos revisiones médicas, pagadas por las víctimas, el estafador hizo una advertencia sobre el futuro trabajo al que accederían, pero antes era necesario un paso más dentro del trámite: el pago de unos pasajes por un valor superior a los 100.000 pesos, que incluían algunos gastos de contabilidad.

“Cuando ya hice todo eso me dijo que toca consignarle 105.000 pesos, porque tocaba tener el tener una contabilidad en la empresa y que por eso me debía mandar esa plata y que nos ayuda con 45. O sea que el pasaje sería por 150, pero que nosotros consignamos 105, entonces ya le mando la consignación”, señalaron los afectados con la estafa.

Luego de todo el supuesto trámite, de cumplir los falsos requisitos para acceder al trabajo y, por supuesto, de pagar el valor o la consignación, el estafador desaparece. “Cuando llegó la hora del viaje, que fue este domingo, me bloqueó, nunca apareció. Entonces, pues, prácticamente nos quitó la plática que que le mandamos”, señalan las víctimas de la estafa cuando entendieron que el delincuente les quitó la “plática”.

La historia la contaron las víctimas con el objetivo de prevenir a otras personas caer en una estafa tan miserable y que atenta con el sueño de encontrar un trabajo para una familia. En este caso sacaron el dinero prestado y confiaron en la oferta laboral. Claramente, las autoridades deberían hacer lo propio e investigar, capturar a estos estafadores que escogieron a los menos favorecidos para convertirlos en sus víctimas.