Con el transcurrir de las investigaciones se siguen conociendo nuevos detalles que estarían relacionados con la muerte de tres personas, quienes aparecieron sin vida el pasado 9 de febrero en un inquilinato del barrio San Pedro Alejandrino, en Ibagué (Tolima).
Las víctimas fueron identificadas como Danna Sofía Varón Olaya, de nueve años, y Fabián Ricardo Olaya, de 22 años, quien se pretendía que era tío de la menor, pero resultó ser primo de la madre de esta niña. En la escena del crimen también se encontraba un cuerpo que respondía al nombre de José Mauricio Barreto, de 22 años.
Aunque los móviles del crimen aún no han sido revelados oficialmente, Blu Radio dio a conocer que las autoridades competentes estarían indagando posibles prácticas de tortura, santería y mutilación.
“El grupo especializado que fue enviado desde la ciudad de Bogotá está trabajando en ello y ya la información en la investigación está muy adelantada, me han dicho que es posible que esta misma semana se dé ya un resultado; esperamos que este esclarecimiento nos dé como resultado la captura de las personas que orquestaron este homicidio de la menor y las otras personas que se vieron involucradas allí”, dijo el coronel Carlos Oviedo, comandante de la Policía Metropolitana de Ibagué, en diálogo con ese medio.
De momento, se creía que la tercera persona habría atacado a los familiares Olaya y luego se había suicidado, pero la historia dio un giro inesperado cuando las autoridades capturaron a José Wilson Barreto, padre de José Mauricio.
“Se capturó, por orden judicial, a una persona que estaría involucrada en los hechos donde una menor fue asesinada. Esta persona está siendo presentada a la Fiscalía con el fin de realizar las audiencias donde un juez definirá su situación jurídica”, señaló el coronel Carlos Germán Oviedo.
Asimismo, el oficial dio a conocer que la niña y el joven fueron encontrados envueltos en una sábana, mientras que Barreto estaba sobre una colchoneta. “La menor y su familiar presentan heridas con arma cortopunzante y la otra persona, al parecer, ingirió un veneno, lo cual le ocasionó la muerte. Esto es lo que se ha podido evidenciar”.
Ante esto, un grupo especial integrado por el Cuerpo Técnico de Investigación (CTI) de la Fiscalía General de la Nación y la Dirección de Inteligencia de la Policía Nacional se encuentran indagando este crimen.
“Hay varias cosas que los investigadores aclararán a su debido momento; sin embargo, se sigue realizando el acompañamiento a la familia afectada”, puntualizó el coronel Oviedo.
De acuerdo con la familia Olaya, las víctimas habían salido desde la mañana del miércoles 8 de febrero de su casa, ubicada en el barrio Jardín Atolsure, sin avisar a dónde se dirigían y fue al día siguiente que fueron hallados sin vida en el barrio San Pedro Alejandrino.
Otra teoría da cuenta que tres hombres habrían participado del crimen y, al parecer, existen fotos, videos y conversaciones que sostuvieron en sus celulares donde se referían a la menor como ‘la princesa’.
Se presume que la menor habría sido sometida a vejámenes sexuales por estas tres personas.
Tragedia en Santander
En un hecho que está siendo investigado por las autoridades policiales, habría muerto una pareja dentro de un carro tras una aparente intoxicación. Las víctimas son una mujer y un hombre.
Este incidente se registró en horas de la noche del martes 7 de febrero en el barrio Villa Luz, del municipio de Floridablanca, área metropolitana de Bucaramanga, en el departamento de Santander.
De acuerdo con el coronel Misael Quiroga, comandante operativo de la Policía Metropolitana de Bucaramanga (Mebuc), los cuerpos sin vida fueron identificados como Édgar Jhovanny Castañeda Beltrán y Diana Marcela Cetina Forero.
Así mismo, dio a conocer que un familiar de la mujer llegó hasta la carrera 8 con calle 49 de dicho sector, donde estaba estacionado el vehículo prendido y, al ver que ella no reaccionaba, rompió el vidrio y se percató de que ambos cuerpos estaban sin vida.
“Los cuerpos son auxiliados por el personal de unas ambulaciones, quienes corroboran que no presenta ninguna lesión física, por lo que empieza la investigación en el lugar, donde la persona que los halló indica que del carro salió un olor y humo, por lo que esto es materia de investigación. Hasta el momento podría ser una intoxicación o si, en su defecto, llegaron a ingerir alguna sustancia”, señaló el comandante operativo de la Mebuc.
Aparentemente, la mujer de 26 años, quien trabajaba en el colegio Virrey Solís, y el hombre de 27 años, que se desempeñaba como conductor en Bucaramanga, se conocían y estaban departiendo en el lugar. Cada una de las víctimas tenía un hijo.