Si bien el servicio de gas natural en Colombia tiene un nivel de penetración cercano al 80 %, lo cual puede convertir al país en un ejemplo mundial en materia de cobertura, aún existe un importante segmento de la población que carece del acceso a este energético.

En consecuencia, alrededor de 1,2 millones de hogares, equivalentes a cerca de 6 millones de colombianos, siguen utilizando insumos como leña, carbón, residuos y combustibles líquidos para cocinar, lo que aumenta la vulnerabilidad de estas personas a enfermedades y muertes cardiorrespiratorias.

Y es que, de acuerdo con la OMS, el contaminante del aire más dañino para la salud humana es el material particulado fino, el cual es producto de la quema de combustibles líquidos como el diésel en el transporte, y de sólidos como la leña y el carbón.

En ese sentido, la Asociación Colombiana de Gas Natural (Naturgas) destacó los datos sobre las regiones del país que más siguen cocinando con leña, con el fin de insistir en la importancia de continuar masificando el servicio del gas natural.

“De acuerdo con la última Encuesta de Calidad de Vida desarrollada por el Dane, la región más crítica en consumo de leña es el Caribe colombiano, con más de 500.000 usuarios activos”, señaló Luz Stella Murgas, presidenta de Naturgas.

Seguido se encuentra la zona central, Antioquia y el Eje Cafetero, con más de 450.000 usuarios; las regiones Oriente y Pacífico con 350.000 cada una, y la Orinoquia y la Amazonia con cerca de 300.000 usuarios.

Vale recordar que el acceso al gas natural ha venido creciendo exponencialmente, pues el país pasó de tener 1,9 millones de usuarios a superar los 10,4 millones en los últimos años.

“Con estos datos, desde Naturgas hacemos un llamado para que los candidatos presidenciales aborden los beneficios socioeconómicos del gas natural. Este energético juega un papel clave en la calidad de vida de las personas, la transición energética y la reactivación económica”, concluyó Murgas.

En ese sentido, a finales de febrero, la agremiación señaló que hablar del gas natural es hablar del 1 % del PIB nacional, del futuro de 100.000 empleos actuales y 20.000 adicionales, de más de 2.900 millones de dólares en inversiones probables, de reducción de emisiones de gases contaminantes y de la viabilidad de la transición energética en Colombia.

“Pretendemos que la conversación en los debates públicos aborde temas que son esenciales para la salud y la competitividad de los cerca de 35 millones de colombianos que usan el gas natural y para el potencial de ciudadanos que hoy no tienen acceso a este servicio. Por esta razón, definimos tres puntos imprescindibles para la discusión entre candidatos, aspectos de interés general, que repercuten en todas las dinámicas de vida de los colombianos”, manifestó Luz Stella Murgas, presidenta de Naturgas.

Los tres puntos clave seleccionados por el gremio, y sus respectivos argumentos, son:

1. Herramienta de bienestar y calidad de vida: si bien Colombia, con una cobertura de cerca del 80 %, es un ejemplo mundial en materia de cobertura, existe un segmento cercano a los 1,2 millones de personas que siguen cocinando con leña, carbón, residuos y combustibles líquidos; esto supone una alta vulnerabilidad a enfermedades y muertes cardiorrespiratorias.

2. La fuente clave para asegurar la transición energética: las fuentes de energías renovables, como la eólica y la fotovoltaica, constituyen el futuro de la provisión energética a nivel global. Sin embargo, por su naturaleza intermitente, necesita un energético limpio que funcione de respaldo: el gas natural.

3. Un motor estratégico para el crecimiento económico: existen 127 proyectos estratégicos identificados, que suman 2.900 millones de dólares. Estos se traducen en desarrollo, crecimiento y reactivación económica y social para el país. Algunos de estos proyectos ya están en ejecución y otros en estructuración.