¿Debería replantearse la conservación de estatuas de conquistadores y esclavistas en las grandes ciudades?Esa es la pregunta que hoy ha tomado fuerza en el mundo tras el asesinato del afroamericano George Floyd en Minneapolis, Estados Unidos. Hoy ese país se ve enfrentado a una cita con la historia y al vandalismo de muchos de esos monumentos. En Inglaterra pasa lo mismo. El debate sobre la reubicación o desmonte de esas estatuas que rinden homenaje a fundadores y conquistadores españoles ya se libra en Colombia. El concejal Terry Hurtado Gómez, representante de la curul animalista en el Concejo de Cali, propuso reubicar el monumento de Sebastián de Belalcázar, ubicado en el oeste de la ciudad, y convocar a los artistas de la región y el país para crear un nuevo proyecto, que contribuya a resignificar el espacio donde hoy se ubica la estatua. Belalcázar fue una figura importante del periodo de la Conquista en Suramérica, y es reseñado como fundador de Quito, Popayán y Cali. A está última, en 1536, la bautizó Santiago de Cali y, según algunos relatos históricos, lo hizo acompañado de 200 españoles y 6.000 indios yanaconas.

El cabildante Hurtado, del partido Alianza Verde, manifestó que esta iniciativa sobre la estatua de Belacazar está relacionada con un debate que se ha propiciado a partir del racismo estructural, que existe en nuestro país y en muchas partes del mundo.“La cultura es una sedimentación del trabajo de las generaciones. Cada una la recibe, la apropia, la valora, la desarrolla; las celebraciones y conmemoraciones hacen parte de esos procesos. En Cali, la comunidad, a través de su Concejo, resolvió en 1936, con ocasión del cuarto centenario de la ciudad, erigir una estatua a Sebastián de Belalcázar”, dijo Hurtado.Según el concejal, es necesario reconocer que es una valiosa obra de arte, en la que el escultor español Victorio Macho expresó tanto la fuerza militar de Belalcázar como la importancia de la relación de Cali y el Valle del Cauca con el Océano Pacífico. Sin embargo, la generación actual, conociendo la historia de sanguinario y explotador del conquistador- y en especial sus antecedentes de participación en la masacre de Cajamarca el 16 de noviembre de 1532- ha llegado a sentirse incómoda con este monumento.

“Proponemos que la estatua sea reubicada en la Casa de las Memorias del Conflicto y la Reconciliación con la que cuenta nuestro Distrito, un lugar donde podrá ser exhibida en el contexto de la historia completa del conquistador y del monumento que lo recuerda”, expresó el concejal caleño.El cabildante resaltó que el lugar donde actualmente está ubicado el monumento es un sitio notable en la ciudad, por lo tanto propuso que sea un espacio destinado a una doble celebración: por una parte, el vínculo entre las dos principales regiones del Departamento; el Valle del Cauca y la región del Pacífico, Buenaventura.Y por la otra, el encuentro y el reconocimiento de las tres etnias que son la raíz constitutiva de nuestro pueblo: la indígena, la europea española y la africana. “Podría convocarse a los artistas de nuestra región y del país a crear proyectos para un monumento que tenga ese sentido de vínculo geográfico, étnico e histórico, que contribuya a reconocernos en nuestra identidad como pueblo, como cultura, como habitantes del valle y del mar”, precisó Hurtado Gómez.