Una hora y media duró la indagatoria del exsenador Armando Benedetti ante la Sala de Instrucción de la Corte Suprema de Justicia en la investigación que se le adelanta por los presuntos hechos de corrupción mediante el desvío de recursos y celebración irregular de contratos en el Fondo Financiero de Proyectos de Desarrollo (Fonade).
El otrora exembajador de Colombia en Venezuela manifestó que asistió a la diligencia judicial pese a que tiene graves problemas de salud. Sin embargo, la magistrada Cristina Lombana no aceptó los certificados que envió y reiteró su citación, “amenzándolo” con cambiarle a su abogado defensor.
“Esta señora tiene un delirio furioso contra mí”, manifestó Benedetti. Durante la diligencia -aseguró- su defensa presentó evidencias frente a los señalamientos que se han hecho en su contra. “Todo esto es una emboscada de Néstor Humberto Martínez junto a Jaime Lombana. Es que no hay un solo testigo que declare en mi contra”.
“Todos los que ya están condenados por lo de Fonade dijeron que yo no tuve nada que ver. Entonces esto es pura baba, puro humo y puro show!”, aseguró Benedetti tras su salida de la diligencia. El exsenador aseguró que cuando iba a poner de presente su situación de salud ante la togada ella no le permitió hablar. “Le iba a decir y me gritó, me regañó, como en un colegio”, precisó.
Igualmente, reiteró que pese a enviar su excusa médica y pedir una reprogramación de la diligencia no fue atendido por el despacho de la magistrada.
“A mí el sábado pasado me extirparon un políporo cancerígeno de 5 centímetros. Yo le había pedido a ella que me diera un plazo porque me citó en menos de 72 horas. No lo quiso hacer, me pasó de los viernes para el lunes, hoy aquí estoy convaleciente, el médico me dijo que tenía que estar 3 o 4 días acostado, no llevo ni dos y estoy aquí parado. Eso es para que usted vea el delirio furioso que tiene ella por perseguirme”, dijo Benedetti a su llegada a la Corte.
“Yo de verdad no sé qué hacer ante ese delirio furioso, frenético y hasta loco y demente que tiene ella conmigo”, agregó.
Respecto del proceso que se adelanta en su contra por las preguntas irregularidades en la contratación, que se presentaron en el Fondo Financiero de Proyectos de Desarrollo (Fonade), que hoy se denomina EnTerritorio, Benedetti aseguró que no hay pruebas y que es inocente.
“Esto es una denuncia de Jaime Lombana, mandaba a hacer por Vargas Lleras y el exfiscal Néstor Humberto Martínez, esto es una emboscada más, donde no hay ni un testigo ni una prueba”, aseguró.
Benedetti es investigado por el delito de interés indebido en la celebración de contratos. Los hechos hacen referencia a las irregularidades que se habrían presentado en la celebración del contrato que tenía como objeto garantizar el bodegaje, la custodia y la actualización del inventario mensual de documentos, así como la digitalización e indexación del archivo del Fonade. Se le entregó a una empresa que, según la investigación, no cumplió los requisitos definidos en la convocatoria ni entregó la póliza para la firma de ese contrato. Aun así, terminó ganando.
En mayo de 2022, la Fiscalía General le imputó el delito de interés indebido en la celebración de contratos a Hernán Emilio Mejía, exfuncionario de la entidad, y a Juan Carlos Santofimio, quien era el representante de la empresa Certicámaras por este mismo caso. La tesis del ente investigador es que se diseñó un contrato de tal manera que la empresa Certicámaras fuera seleccionada por el extinto Fonade para que le fuera adjudicado el contrato.
Según la Fiscal del caso, uno de los testigos, llamado Jorge Henao, dijo que Certicámaras fue, supuestamente, recomendada por el senador Armando Benedetti y su exasesora Elsy Pinzón. Sin embargo, este no es un hecho comprobado.
“También se exterioriza el interés indebido, específicamente el contrato mencionado, al ingresar a las instalaciones de Fonade de forma posterior y exclusivamente en la reunión sostenida entre Jorge Iván Henao, exasesor de la gerencia de Fonade, y el senador Armando Benedetti. Estos ingresos ocurrieron antes y durante la adjudicación del contrato. También manifiesta su interés indebido al ingresar simultáneamente a Fonade con Elsy Mireya Pinzón, la asesora o funcionaria de la UTL del senador ya mencionado”, aseguró la fiscal del caso en su momento.
El contrato fue firmado luego de una convocatoria privada, incumpliendo lo establecido por la ley, con apenas tres oferentes; dos quedaron fuera, según la Fiscalía, tras identificar que los términos del contrato, las características, la experiencia y la capacidad de la empresa contratante fueron modificados para asegurar la adjudicación.
“Por estos hechos, una fiscal de la Dirección Especializada contra la Corrupción imputó a los supuestos involucrados el delito de interés indebido en la celebración de contratos. El cargo no fue aceptado por los investigados”, explicó la Fiscalía.
El contrato adjudicado tuvo un valor superior a los 1.000 millones de pesos y el contratista logró desarrollarlo a pesar de las irregularidades que fueron identificadas por la Fiscalía. Entre los imputados se encuentra la funcionaria del Senado que forma parte de la Unidad de Trabajo Legislativo del senador Armando Benedetti.