En entrevista con SEMANA, Yenny Saldarriaga, excontadora de Daneidy Barrera Rojas, conocida como Epa Colombia, rompió su silencio y habló sobre una denuncia que interpuso contra la creadora de contenido por amenazas, calumnia e injuria.

Saldarriaga, quien trabajó con Barrera entre marzo y agosto de 2021, afirmó que las agresiones en su contra comenzaron el 30 de julio, el mismo día que Carlos Toro, director comercial en la empresa de Epa Colombia, según su propia versión, fue aparentemente secuestrado por la influencer y sus hombres de seguridad, en la bodega donde tiene una de las sedes de su negocio de venta de queratinas. El motivo era que no podía salir hasta que Saldarriaga llegara a Bogotá, desde Medellín, donde se encontraba. La mujer afirmó que, ante la angustia de Toro y la exigencia de Daneidy tuvo que tomar un vuelo inmediato hacia la capital del país.

En un video de 35 segundos, que ya está en poder de la Fiscalía, y que fue tomado de las cámaras del circuito cerrado de la bodega en Bochica, se ve el lugar con cientos de cajas de cartón selladas con los productos que comercializa. Al fondo aparece Epa con un buzo blanco, pantalón negro y tenis rosados. Se ve que cruza un par de palabras con Carlos, quien no tiene tapabocas, y camina escoltado por los tres hombres de seguridad. Ellos son seguidos por la propia Daneidy, quien camina a paso acelerado.

“Eso fue el 30 de julio, cuando yo estaba en Medellín y tuve que comprar un vuelo y venir a Bogotá de inmediato porque ella retuvo a Carlos Toro, quien era la persona encargada de todas las ideas comerciales dentro de la compañía”, dijo Saldarriaga.

“Carlos me llamó y me dijo: “Si tú no vienes, ella me no me deja salir”. Cuando me dice eso, yo le escribo: “Daneidy, no te preocupes que ya voy para Bogotá y lo solucionamos allá”. Me dejó en visto, no pasó absolutamente nada, cogí el primer vuelo, vine hasta Bogotá y me dirigí a la sede de Bochica. En ese transcurrir le dije a la persona encargada de mi transporte acá: “Mira, si a las cinco de la tarde yo no he salido, por favor llama a la Policía, me escribes, porque algo pasa”. La situación estaba muy tensa. Cuando llegué a la sede de Bochica, empezó a amenazarme. Me dijo que mi hija estaba vigilada, que uno no se metía con las personas que tenían mucha masa de seguidores, y otras cosas que a mí me parece de hecho aterrador volverlas a mencionar”, agregó.

Según unos chats presentados por Yenny, también como pruebas ante la Fiscalía, el camino hacia la bodega de Epa Colombia en Bochica estuvo minado por una seguidilla de amedrentamientos, no solo para ella, también para una asesora llamada Lina. En uno de ellos le reclama que llegue pronto con los token, la claves para hacer transacciones bancarias.

“Más que amenazarme a mí, amenazó a mi hija. Me dijo que la tenían vigilada, que sabía dónde vivía yo, dónde estudiaba mi hija, que a ella la respaldaban personas muy grandes, que uno no se dañaba la vida con una persona que movía tantas masas en las redes sociales. Amenazó también a Lina Mesa, que era la coordinadora del proyecto, y le decía: “Hágalo por ellos, hágalo por su familia”. Amenazó a Carlos y a sus hijos, que, no sé si para ustedes, pero para mí, como mujer, es lo más importante en mi vida, cuando te tocan a los hijos eso ya va trascendiendo el nivel”, sostuvo.

Una hora después, dijo que Epa le pidió perdón y reconoció que se dejó meter cizaña, acompaña el mensaje de un emoticón llorando y dice “Lina, perdón, no quiero que te vayas nunca”.

Según Yenny, en entrevista con SEMANA, todo se trató de que Epa Colombia pensaba que le iban a robar cerca de 2.000 millones de pesos que estaban en una cuenta, y por eso retuvo a Carlos y las obligó a ir de urgencia. Cuenta y lo ratifica con documentos entregados a la Fiscalía que el dinero se entregó el 3 de agosto, en efectivo a Karen, la cuñada de Daneidy, en un banco en el Restrepo, en Bogotá.