El crimen de Cecilia Cubas fue uno de los hechos más violentos que ha vivido Paraguay. A la mujer de 32 años la secuestraron y por más de un año la mantuvieron en condiciones denigrantes. Su hermana Silvia Cubas le contó los detalles de esa tragedia a SEMANA. “La perdimos el 21 de septiembre de 2004 y recuperamos su cuerpo el 16 de febrero de 2005″, relata.
La mujer de 32 años estuvo privada de la libertad en condiciones paupérrimas, sin comida y sin acceso a lo mínimo. Y el final de sus días fue aún más aterrador: fue enterrada viva, y esa agonía fue dejada en evidencia luego en la autopsia en la que se detectó que había arena en sus pulmones. “Hemos vivido un calvario”, sostuvo Silvia.
El caso revivió esta semana por cuenta de la captura de Rodrigo Granda en México. El excanciller de las Farc estaba de viaje, con permiso de la JEP, pero fue detenido pues pesa sobre él una circular roja de Interpol solicitada por Paraguay. Granda fue acusado en ese país de asesorar a la banda que secuestró y asesinó a la hija del expresidente de ese país, Raúl Cubas.
Granda asegura que su participación en ese caso fue un montaje. Pero Silvia le refuta. Para ella, la justicia de Paraguay tiene los elementos suficientes para probar que él sí estuvo detrás de asesorar ese secuestro. “Granda es el director técnico del secuestro en Paraguay”, dijo.
SEMANA tuvo acceso al contenido del computador de Raúl Reyes. En su momento, cuando el exlíder guerrillero fue dado de baja en Ecuador en 2008, se abrió una polémica enorme en el país por la legalidad que podría tener este material en los procesos judiciales. Al final, la Corte Suprema de Justicia determinó que las pruebas obtenidas en ese aparato no eran legales. Así, todo su contenido quedó por fuera de las investigaciones sobre el conflicto que se desarrollaban en Colombia.
Sin embargo, lo que había en ese computador era muy revelador y hoy muestra algunos detalles importantes para esclarecer la verdad en el caso de Cecilia Cubas. Por ejemplo, hay un mensaje que enviaron alias Amparo y alias Camila a Raúl Reyes.
En ese mensaje las dos mujeres le contaron los movimientos internacionales del grupo guerrillero. Hablaban de planes que descubrieron para atentar contra alguno de ellos y de una supuesta “lista entregada por Uribe a Chávez”, aparentemente sobre el tema del secuestro.
En el reporte aseguran que alias Tino “estuvo por Uruguay y habló con algunos amigos. Dice que por allá hay muy mala atmósfera con respecto a lo del caso Cubas y lo relacionan mucho con Ricardo. Ante la posibilidad de que Ricardo sea extraditado para allá, estuvo hablando con Gomarán y este dijo que el abogado qué trató su caso es muy bueno y en todo caso podría ayudar”, sostiene.
Al final, le cuentan también la situación que viven dos de sus camaradas extraditados, como Simón Trinidad y alias Sonia, a quien describen como una mujer que “se mostró muy serena y firme en sus convicciones cosa que nos enorgullece”.
Y ahí le advierten al líder guerrillero que debe actuar por Ricardo, en referencia a Ricardo Téllez, el alias que tenía Rodrigo Granda cuando era miembro activo de esa guerrilla. “Sabemos que Ricardo puede estar, próximo a sufrir el mismo destino y eso no deja de mortificamos día a día. ¿Qué puedo.. qué podemos hacer?”, señala.
Las dos mujeres continuaban hablándole de las propiedades de las Farc en Venezuela y su mantenimiento, y de preocupaciones por plata. Pero líneas después vuelven a insistir en que la principal angustia tiene que ver con lo que le pueda pasar a ‘Ricardo’ por el caso Cubas.
“Queremos saber si usted ha tenido alguna razón por el lado del abogado y los amigos de allá del dinero que enviamos de acá (5 mil dólares), que eran, según Perales, para gastos de abogado y lo que necesitara Ricardo. Le hemos preguntado a Perales, pero no nos ha dado mucha razón. En todo caso él fue el que quedó encargado de disponer de ese dinero y como le dijimos que tenía que responder ante ustedes, sería bueno que adare este detalle en alguna nota que usted le enviara”, le insisten a Reyes.
Al final, ambas mujeres le contaron de su vida personal y de sus problemas.
La hermana de Cecilia Cubas asegura que en su momento la justicia de Paraguay tuvo acceso a este material e insiste en que no tiene dudas de su participación en el crimen de su hermana. “Él (Rodrigo randa) podrá no pagar con la justicia de los hombres, pero hay una justicia de la que no se salvará. Ante la justicia de Dios todos pagamos. Y él va a pagar por todo el terror que él sembró”.