La masacre de siete policías en San Luis, Huila, tiene a la Fiscalía General de la Nación trabajando a todo máquina, como se dice popularmente.

Tras la complejidad del caso, en que el ataque se dio en una emboscada, donde no hay cámaras de seguridad, no se cuenta con testigos, o por lo menos la gente no quiere hablar por miedo a represalias, la Fiscalía decidió adoptar parte de la estrategia que se usó para llegar a los responsables del crimen del fiscal paraguayo Marcelo Pecci.

Dentro de esa estrategia, según conoció SEMANA, se encuentra la utilización de un moderno equipo electrónico de fabricación colombiana que se encarga de triangular los teléfonos celulares y las llamadas que estuvieron en el sitio.

Para los investigadores está claro que para atacar a los policías, los criminales se tuvieron que comunicar por algún medio para informar el paso a paso de la patrulla con todos los ocho policías.

El equipo electrónico, según logró establecer este medio de comunicación, se encarga de recibir la información de todas las antenas de telefonía celular de la zona, con esos datos se pueden obtener los números de teléfono de los celulares que estaban en el lugar en el momento del ataque y de esta manera puede hacer la triangulación.

De acuerdo con fuentes de la Fiscalía, gracias a este equipo se logró descubrir a los sicarios y partícipes del homicidio del fiscal paraguayo Marcelo Pecci, ocurrido en las islas de Barú en Cartagena.

Masacre de Policías en el Huila | Foto: Revista Semana

La fuente reveló que este dispositivo logró ubicar las líneas telefónicas que usaron los sicarios para coordinarse entre sí para cometer el homicidio. “Los sicarios se llamaron a través de varios teléfonos para ejecutar el crimen, este equipo lo que hace es tomar la información de las antenas de celular de la zona, esa información nos dice a nosotros la hora exacta en que se usó esa línea, y con que otras líneas tuvo relación, así pudimos ubicar a todos los responsables del crimen del fiscal Pecci”, dijo la fuente de la Fiscalía.

Con el equipo ya se han podido identificar diez líneas de teléfono celular que coinciden con el lugar y la hora del ataque en contra de la unidad policial en San Luis, Huila. De acuerdo con los investigadores, ahora el paso a seguir es hacer la triangulación y la relación de esos números telefónicos.

Como se recordará, el pasado viernes 2 de septiembre el país se estremeció con la noticia sobre que una patrulla de la Policía había sido atacada con explosivos en una vía rural del departamento del Huila. A medida que pasaban las horas se conocían más detalles del evento.

Se trataba de una patrulla de la Policía que había salido desde Neiva, con destino al apartado corregimiento de San Luis, en la que se movilizaban ocho uniformados.

Masacre de Policías en el Huila | Foto: Revista Semana

Luego de recorrer un largo trayecto por una vía en pésimas condiciones, la patrulla fue emboscada. Dos cargas explosivas fueron activadas a su paso, con unos policías muertos y otros gravemente heridos, desde el monte los criminales los remataron con disparos de fusil y armas cortas.

De la violenta acción solamente sobrevivió el auxiliar de Policía Gustavo Esquivel, quien hoy es el único testigo con el que cuenta la Fiscalía sobre dicha masacre. Las primeras investigaciones señalan que los responsables del ataque serían integrantes de las disidencias de las Farc, de la estructura Ismael Rivera, que es parte de la Dagoberto Ramos.

Un informante le contó a la Fiscalía que el atentado se estaba programando desde principios de año, pero se tenía pensado hacerla en el municipio de Algeciras.