La defensa del ya condenado exfiscal anticorrupción Luis Gustavo Moreno Rivera, sentenciado a 4 años y 10 meses de prisión, hizo la solicitud a la justicia colombiana para ser declarado en insolvencia económica.
Los registros judiciales muestran la petición que hizo la defensa del exfuncionario al Juzgado Tercero de Ejecución de Penas de Bogotá, y de ser aceptada, le evitaría a Moreno pagar la multa de 143,74 salarios mínimos mensuales legales vigentes, que forma parte de su sentencia tras determinarse su responsabilidad en el escándalo de corrupción llamado como el cartel de la toga.
No obstante, esto dificultaría que el exfiscal anticorrupción reciba beneficios como lo es la casa por cárcel o la vigilancia electrónica.
Moreno está detenido desde finales del año pasado en una unidad militar, a la que se trasladó desde los Estados Unidos, donde pagó una pena por recibir un anticipo de un soborno del exgobernador Alejandro Lyons.
En septiembre de este año se dio a conocer que, aunque estaba en entredicho, el Juzgado 64 de Control de Garantías prorrogó por un año más el principio de oportunidad que fue alcanzado en 2018 con Moreno, quien se ha convertido en el principal denunciante de la macabra alianza entre magistrados para –a cambio de millonarios sobornos– torcer procesos contra aforados que eran investigados en la Corte Suprema de Justicia.
El escándalo del cartel de la toga ya tiene tras las rejas al expresidente de la Corte Francisco Ricaurte a una pena de 19 años y al también exmagistrado Gustavo Malo Fernández a 9 años. Esto por los señalamientos del exfiscal Moreno, que luego de haber caído ha venido contando todo lo que sabe sobre el que es considerado el caso de corrupción más grave que se haya dado en la historia de la justicia del país.
Pese a la efectividad de la colaboración con la justicia, Moreno estuvo a punto de no continuar en su papel de delator, por un cambio en la Resolución 1044 con la que se le prorrogaban los beneficios a cambio de información sobre 18 integrantes y beneficiarios de esta organización criminal.
El asunto es que el documento tenía una especie de adenda, según la cual, además del compromiso de comparecer a las audiencias y hacer los señalamientos en cada proceso, la validez de este beneficio jurídico solo aplicaba si fruto de estas confesiones había condenas efectivas contra los protagonistas del cartel de la toga.
No obstante los reparos de la defensa de Moreno, que argumentaba que no dependía de su cliente que las confesiones terminaran en condenas efectivas, sino de las decisiones que tome la justicia, y que en buena medida las decisiones dependen justamente de la contundencia con la que la Fiscalía presente los casos. Finalmente fue reconocido por un año más el principio de oportunidad.
La jueza 64 de Garantías, Ángela Granados, hizo esta explicación luego de anular el condicionamiento de la Fiscalía y al avalar la nueva decisión. Además, la jueza Granados expuso que, hasta el momento, la colaboración de Moreno ha sido clave para involucrar a 18 personas como participantes, en alguna medida, de este escándalo y para determinar la condena contra los exmagistrados Francisco Ricaurte y Gustavo Malo.
Los nombres involucrados y sobre los cuales cantará el exfiscal Gustavo Moreno son: los abogados Luis Ignacio Lyons España, Leonardo Luis Pinilla (exsocio de Moreno y pieza clave en los famosos audios de la DEA) y Gerardo Torres Roldán. Los exmagistrados Camilo Andrés Ruiz (auxiliar), Francisco Ricaurte, Camilo Tarquino, Leonidas Bustos y Gustavo Malo.
Además de quienes eran objeto de las solicitudes de millonarias coimas, los congresistas Martín Emilio Morales, Julio Gallardo Archbold, Argenis Velásquez, Álvaro Ashton, Musa Besaile y Nilton Córdoba. También los exgobernadores Lucas Gnecco Cerchar, Juan Carlos Abadía y Alejandro Lyons.
Fue justamente la negociación ilegal que trató de hacer Moreno con el Lyons en Miami la génesis de este escándalo. Pues el exfiscal anticorrupción viajó hasta Estados Unidos para proponerle torcer el proceso por el desfalco a la salud en Córdoba, a cambio de una millonaria suma, cuyo anticipo fue justamente entregado en esta cita.
A Moreno le fueron encontrados y decomisados los 10 mil dólares, y a los pocos días fue la misma exvicefiscal María Paulina Riveros quien dio la noticia al país. Leyó un comunicado en el que informó que el responsable de luchar contra la corrupción acababa de ser capturado justamente por esa conducta. Por si fuera poco, con un agravante para Moreno: que recibió el soborno en Miami, Estados Unidos, a la luz de una operación conducida por la DEA con la participación estelar del exgobernador de Córdoba Alejandro Lyons, quien tiene graves cuentas pendientes con la Justicia colombiana.