La Jurisdicción Especial para la Paz (JEP) exhortó a la Sala de Casación de la Corte Suprema de Justicia para que revise varios aspectos de avalarse la extradición del excomandante del Clan del Golfo, Dairo Antonio Úsuga David, más conocido como Otoniel.
En el segundo punto de la decisión que rechazó el sometimiento del narcotraficante se le recomienda al alto tribunal que la entrega esté condicionada una vez que Otoniel entregue toda la información ante el Sistema Integral de Verdad, Justicia, Reparación y No Repetición (SIVJRNR).
“Exhortar a la Sala de Casación Penal de la Corte Suprema de Justicia para que, de acuerdo con los consignado en esta providencia, considere que, en caso de conceptuarse favorablemente la solicitud de extradición, pueda disponerse en la modalidad condicionada”, precisa la decisión de la Sala de Definición de Situaciones Jurídicas.
En el resuelve se advierte en dos puntos esta condicionalidad: “i) que la entrega se haga una vez el señor Úsuga David haya cumplido con los requerimientos del SIVJRNR para concretar el derecho de las víctimas a la verdad y ii) a que, una vez se cumpla con la pena correspondiente en Estados Unidos, ese gobierno deporte al mencionado a Colombia, con la finalidad de que asuma la responsabilidad por los delitos acá cometidos, sin necesidad de solicitud de extradición elevada por el gobierno colombiano para tal fin”.
La Sala de Definición de Situaciones Jurídicas rechazó la solicitud de sometimiento de Otoniel al considerar que no logró aportar pruebas suficientes que lo acrediten como un tercero colaborador civil en el conflicto armado. Debido a esto se determinó que la JEP no tiene competencia sobre los hechos por los cuales ha sido procesado en la justicia ordinaria.
Esta decisión ya le fue informada a la Corte Suprema de Justicia, a la Sección de Revisión, a la Sección de Ausencia de Reconocimiento y a la Sala de Reconocimiento de la JEP donde Úsuga David ha sido citado en calidad de testigo dentro del caso 04, que investiga la situación territorial del Urabá, y en el caso 03, conocido como el de falsos positivos.
En la actualidad, Otoniel se encuentra privado de su libertad en los calabozos de la Dijín de la Policía Nacional. La Sala de Casación de la Corte Suprema de Justicia estudia la petición de extradición radicada por los Estados Unidos en contra del exjefe del Clan del Golfo quien es requerido por delitos relacionados con el tráfico de drogas, tráfico de armas y homicidios selectivos.
El despacho del magistrado Diego Corredor dio dos días de plazo para presentar sus alegatos de conclusión. Sin embargo, este trámite se podría ver afectado por una recusación que radicaron los abogados de Otoniel en contra del togado al considerar que una acción suya en Twitter lo deja sin criterio para estudiar este caso.
La recusación hace referencia a un RT que hizo el magistrado desde su cuenta personal de Twitter el 23 de octubre de 2021 a una publicación del exalcalde de Bogotá, Enrique Peñalosa en la cual celebraba la captura de Otoniel, considerado el hombre más buscado del país.
“Felicitaciones a nuestra Policía, nuestro Ejército y al Presidente Duque por la captura de este criminal que tanto daño le ha hecho a los colombianos!”, trinó el exmandatario distrital.
Esta acción generó que el abogado Ricardo Pineda Torres, quien hace parte del equipo de defensa del requerido narcotraficante, presentara una recusación contra el magistrado Corredor quien actualmente estudia la petición de extradición.
Para la defensa de Otoniel este simple hecho representaba un prejuzgamiento, situación por la cual pidió que se aleje de la discusión y sea otro magistrado el que estudie el caso.
En un primer momento, el magistrado Corredor no aceptó la recusación. Sin embargo, será el despacho del magistrado Luis Antonio Hernández Barbosa el que evaluará la situación y tomará una decisión de fondo.
Sin embargo, esta recusación podría afectar el estudio del caso ya que, de avalarse la petición de la defensa de Otoniel, se tendría que designar otro magistrado para que estudie el caso.