La alocución del presidente Juan Manuel Santos del pasado lunes, donde dijo que el fallo de La Haya era inaplicable si no existía un tratado, no ha dejado de tener repercusiones.Primero fue la respuesta del mandatario nicaragüense Daniel Ortega, en la que aseguró que su gobierno está dispuesto a negociar un tratado con Colombia siempre y cuando se cumpla la decisión de la Corte Internacional de Justicia.El comandante del Ejército del país centroamericano, Julio César Avilés, advirtió que no se negociará “ni una gota de agua”.Pero en este torbellino de declaraciones de las últimas horas entró el representante (agente) de Nicaragua ante La Haya, Carlos Argüello, quien desestimó que Nicaragua tuviera “medidas expansionistas” como lo mencionó el presidente Juan Manuel Santos.  Argüello, quien defendió los intereses de Nicaragua ante la Corte Internacional de Justicia, dijo que su país sólo está reclamando lo que es suyo por derecho, según declaró al diario La Prensa de Managua.El jurista preguntó “¿cómo va a ser un país expansionista si está reclamando sus derechos? Estas no son pretensiones nuevas, esto no es nada expansionista”, en medios oficialistas y en respuesta a las declaraciones del presidente Santos.Según el especialista, las millas que reclamó Nicaragua están amparadas bajo la Convención de Derechos del Mar y que, el caso, había sido informado con anterioridad a los países vecinos.El presidente (Ortega) lo que ha ofrecido es facilitarle a Colombia todo lo necesario para cumplir el fallo, incluso si eso implica un tratado, pero no está ofreciendo regresar su territorio“, agregó el delegado, quien piensa que la conversación entre ambos países puede incluir temas como la pesca.Argüello añadió que “Nicaragua no va a dejar de reclamar lo que es propio y no está pidiendo nada que afecte a sus vecinos” y que ese país ha sido respetuoso del derecho internacional y pretende mantener los mejores lazos fraternos con todos los países vecinos.Panamá se sumaEn este espinoso tema entró presidente de Panamá, Ricardo Martinelli, quien acusó a Nicaragua de querer “coger los mares territoriales panameños” y aseguró que su Gobierno peleará solo o junto a otros países de la región para impedirlo, informó la agencia EFE."Vamos a pelear como país de forma individual o de forma conjunta, porque no podemos permitir que Nicaragua, que está lejísimos de aquí, quiera coger los mares territoriales panameños", declaró Martinelli.El presidente confirmó que Panamá suscribirá junto a Colombia, Costa Rica y Jamaica una carta que expone esa situación, y que será entregada a finales de este mes al secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, por el gobernante colombiano, Juan Manuel Santos, según este mismo anunció el lunes pasado."Sí, Panamá también (va a firmar la misiva) porque parece ser que Nicaragua se quiere coger todos los océanos territoriales que le pertenecen a esos países y a Panamá", dijo Martinelli."Con lo que ellos (Nicaragua) están pidiendo, casi quiere llegar a la ciudad de Colón (en la costa del Caribe de Panamá) y eso no tiene ningún fundamento", agregó.El pasado 22 de noviembre la Cancillería de Panamá informó que revisaba de manera "exhaustiva" un fallo que tres días antes había emitido la Corte Internacional de Justicia (CIJ) sobre un litigio entre Nicaragua y Colombia, que redefinió los límites marítimos de esos dos países en el Caribe.El Ministerio de Exteriores dijo entonces que se encontraba verificando si el fallo de la CIJ afectaba "en forma alguna" los intereses de Panamá, sin que se haya conocido oficialmente el resultado de ese análisis.La sentencia la CIJ dejó en manos de Colombia siete cayos del archipiélago de San Andrés, cuyas islas mayores ya se le habían concedido a esa nación en 2007, y otorgó a Nicaragua una franja marina en la zona que Bogotá calcula en unos 75.000 kilómetros cuadrados y Managua en más de 90,000 kilómetros cuadrados.Con información de EFE