Para el próximo 27 de mayo quedó programada la audiencia en la que las víctimas le exigirán verdad y aceptación de responsabilidad al general en retiro Mario Montoya dentro del expediente que se le adelanta por las ejecuciones extrajudiciales que se registraron en el departamento de Antioquia entre los años 2002 y 2003 cuando fue comandante de la Cuarta Brigada del Ejército.
El oficial, quien fue uno de los primeros en someterse a la JEP, deberá responder ahora en el Caso 03 que investiga asesinatos y desapariciones forzadas presentados como bajas en combate por agentes del Estado, junto a 60 antiguos integrantes de la Brigada que comandó. Todos ellos son investigados por 161 ejecuciones extrajudiciales.
El general en retiro, quien fue comandante de esta Brigada entre el primero de enero de 2002 y el 15 de diciembre de 200, fue mencionado en 24 versiones rendidas por comparecientes ante la JEP, así como a otros militares que pertenecieron al Grupo de Caballería Mecanizado No.4 ‘Juan del Corral’, la Agrupación de Fuerzas Especiales Urbanas No.5, el Batallón de Artillería No.4 ‘Coronel Jorge Eduardo Sánchez Restrepo’, el Batallón de Infantería No.32 ‘General Pedro Justo Berrío’, el Batallón de Infantería No.10 ‘Coronel Atanasio Girardot’ y el Batallón de Ingenieros de Combate No. 4 ‘General Pedro Nel Ospina’.
En la diligencia judicial, que se realizará en el municipio de Granada (suroeste antioqueño), fueron convocadas un centenar de víctimas acreditadas que se se pronunciarán públicamente sobre los aportes a la verdad entregados por los comparecientes que hicieron parte de las unidades que presentaron el mayor volumen de victimización para la época de los hechos priorizados. Esta primera audiencia corresponde a la comandancia del general (r) Montoya. Paralelo a ello, la Sala avanza en la documentación del segundo periodo priorizado: 2004 - 2006.
En la convocatoria se advierte que el universo provisional de hechos objeto de investigación en el macro caso 03, subcaso Antioquia, se consolidó durante el proceso de valoración del acervo probatorio que, entre otras cosas, incluye ocho informes aportados por las víctimas y la Fiscalía General de la Nación, así como la contrastación judicial de la JEP con procesos de la justicia ordinaria y la justicia penal militar.
La Sala de Reconocimiento de Verdad inspeccionó archivos de cada una de las seis unidades militares pertenecientes a la Brigada IV. Estos documentos oficiales incluyen libros de programas operacionales, misiones tácticas, órdenes del día, radiogramas operacionales y las carpetas de las operaciones militares en las que se reportaron las bajas en combate.
La audiencia de observaciones orienta la participación de las víctimas hacia la restauración temprana de sus derechos. Tal como lo ha dicho la Sección de Apelación de la JEP, la memoria de las víctimas es fundamental para determinar con precisión la hora, el lugar, los autores y las circunstancias en las que se perpetraron las violaciones, esclarecer las motivaciones de sus perpetradores, el contexto o plan en el que se insertaron los ataques, los cuales son elementos claves para el proceso de contrastación de la investigación.
En febrero de 2020 y septiembre el general Montoya rindió su versión frente a estos hechos ante la Sala de Reconocimiento de la JEP. Tras esto, las víctimas reclamaron la falta de datos nuevos y aceptación de responsabilidad por ordenar estas ejecuciones extrajudiciales.
En agosto de 2021, fracasó la imputación de cargos en contra del oficial en retiro por 104 falsos positivos puesto que su expediente se encontraba en la JEP.