El grupo de geólogos que se encontraban en el campamento que la empresa Continental Gold en el corregimiento Ochalí, de Yarumal, recibieron el martes un paquete con uniformes nuevos que, sorpresivamente, estaban hechos jirones: tasajeados, rotos. Laura Alejandra López Aguirre, asesinada en la madrugada del miércoles, vio en ese paquete extraño una amenaza, una intimidación y así se lo hizo saber a su papá Jairo Flórez, con quien habló el martes a las 10 de la noche para decirle que tenía miedo, que estaba asustada, que la zona estaba muy caliente. “Eso era una evidencia de que estaban en riesgo inminente. ¿Si esos muchachos estaban en peligro por qué la empresa no los sacó de allá? ¿Por qué no mandó al Ejército, o por qué no mandó un helicóptero y lléveselos? Para mí fue negligencia de la empresa. Si ellos mandan unos uniformes al campamento y a los trabajadores les llegan rotos es porque era riesgoso. La hijita mía me dijo en el Whatsapp: “Papi, como quien dice no nos conviene estar por aquí”, con una carita triste. Entonces si la empresa sabía eso me parece que hubo negligencia. Debió haber mandado ejército para que los protegiera”. Escucha"Los últimos momentos de los geólogos asesinados en Yarumal" en Spreaker. Laura Alejandra López era geóloga de la Universidad Nacional Sede Manizales, tenía 28 años y llevaba cinco meses trabajando en Continental Gold, permanecía 20 días en campo y 10 días en su casa de Manizales. Sus últimos días de descanso, dice su padre, se le extendieron porque la llamaron a decirle que la zona estaba muy peligrosa, “ahora hace ochos días la llamaron y le dijeron que viajara el domingo, me la hubieran dejado aquí si sabían que las cosas estaban peligrosas”. Según el gobernador de Antioquia, Luis Pérez, a las dos de la mañana los bandidos llegaron y se presentaron como miembros de las Farc y del ELN, hicieron arrodillar al equipo profesional y cuando un guerrillero desaseguró el fusil, uno de los geólogos se le lanzó, algunos emprendieron la huida mientras tres fueron fusilados por la espalda. Esta es la versión del Gobernador. Pérez aseguró que le ha pedido a la cúpula militar una explicación sobre lo sucedido y aclaró que ni el ejército ni la Policía habían recibido denuncias de amenazas a la comisión. “El ejército tenía 150 hombres cerca de la comisión y la misma comisión les pidió al ejército que se alejara porque la comunidad les había dicho que era mejor. El ejército se alejó por solicitud de la comisión. Le hemos pedido a Continental Gold que tiene que ser mucho más diligente con este tema, porque si las familias han manifestado que se tenían amenazas es muy triste que la empresa no se las haya comunicado al Gobierno, al ejército o a la Policía. Ochalí y esa zona fueron siempre del frente 36”. Pese a que el frente 36 de las disidencias de las Farc desde hace un año hace presencia en la zona y que han intimidado a varias empresas como EPM con ataques, Continental Gold aseguró que no habían recibido amenazas: “La evaluación conjunta con las autoridades locales, la fuerza pública y la misma comunidad, indicaban que existían condiciones para realizar actividades de exploración en la zona”. Sobre las denuncias que señalan que pudo existir negligencia por parte de la compañía, debido a que no se registró ningún enfrentamiento armado, la multinacional canadiense aseguró que cuentan con un sistema de protección “con personal encargado de la seguridad de nuestros empleados para sus labores de campo, al igual que el acompañamiento directo del Ejército Nacional. Este sistema de seguridad cumple con protocolos y estándares internacionales para brindar de manera preventiva protección al personal que llevaba a cabo trabajos de exploración geológica de campo abierto. Lo anterior es reforzado con una estrategia de trabajo y relacionamiento social con la comunidad en el territorio donde se desarrollan las actividades de exploración, como lo han expresado los mismos pobladores en medios de comunicación”. Continental aseguró por medio de un comunicado que la reacción de su personal de protección en el momento de los hechos evitó “que fueran masacrados la totalidad de las 11 personas, logrando que 7 de ellos sobrevivieran al ataque”. Mientras tanto, 36 horas después, sigue desaparecido el auxiliar de exploración: José Dionisio Guerra Guerrero, de 26 años y nacido en Segovia, Antioquia. Esto contrario a lo que había dicho la secretaria de Gobierno de Antioquia, Victoria Eugenia Ramírez, quien aseguró que todos los trabajadores estaban localizados. Según la IV Brigada del ejército en la zona hay personal haciendo un operativo de búsqueda, pues los subversivos no han aclarado si lo tienen secuestrado.   Hay que recordar que en julio de 2015 el entonces gobernador de Antioquia, Sergio Fajardo, no pudo visitar el corregimiento de Ochalí porque el frente 36 de las Farc lo tenía sitiado. Entonces tuitió: “Frustración. Miércoles vamos a los corregimientos Ochalí, Cedeño y Llanos de Cuivá en Yarumal. ¿Por qué frustración?”. Minutos más tarde trinó: “No iremos a Ochalí. El Ejército y la Policía no están en capacidad de darnos apoyo en seguridad para el viaje en ese momento. Lástima”. Ocho días después militarizó la zona y visitó la zona con la peculiaridad que horas antes de aterrizar, los soldados encontraron en el “helipuerto” una mina antipersona.    El asesinato de este grupo de geólogos, quienes sólo realizaban actividades de exploración, tiene conmocionados a los antioqueños y el caso está lleno de preguntas para las que el gobernador Luis Pérez ha prometido dar respuesta.