La Federación Nacional de Educadores, que congrega al grueso de maestros públicos en Colombia, no escondió su simpatía con Gustavo Petro durante su campaña política y confesó abiertamente su preferencia política. Ahora, con el líder de izquierda en el poder, el sindicado quiere estar cerca del gobierno y lo está logrando.
Este viernes, el excongresista Mauricio Lizcano, una de las principales cabezas visibles del comité de empalme de Gustavo Petro, reveló que la agremiación de maestros hace parte del grupo que recibe la información del gobierno de Iván Duque.
“El comité de empalme está trabajando de la mano con todos los sindicatos y Fecode no es la excepción. Nuestro equipo ha estado en permanente comunicación con ellos para aclarar dudas en los matices, respetando obviamente los canales institucionales que es su junta directiva”, afirmó Lizcano.
Las directivas de Fecode, respondieron el mensaje. “Saludamos la comunicación que ha habido con la comisión de empalme y ratificamos que estamos dispuestos al fortalecimiento de la educación pública”.
La posición del magisterio de docentes sacó nuevamente de la nevera la polémica sobre el papel que cumple la agremiación frente a la política en el país. ¿Está bien visto que los maestros estén participando abiertamente en política? ¿Los padres de familia están de acuerdo en que quienes guíen a sus hijos hagan parte de los procesos electorales en el país?
Aunque los educadores tienen derecho a votar porque son ciudadanos colombianos, el activismo ideológico no es bien visto y más cuando se han conocido denuncias en algunas regiones del país de docentes activistas que infunden ideologías políticas desde las aulas de clase.
“Fecode es un gremio tan nocivo e ineficiente que ni los socialistas que ayudaron a elegir los quieren cerca”, dijo el excandidato presidencial Enrique Gómez Martínez.
Por su parte, el senador de Cambio Radical, Carlos Fernando Motoa, aseguró que lo de Fecode “es verdaderamente vergonzoso. Pusieron en riesgo la educación de millones de niños, jóvenes y adolescentes por hacerle campaña a Gustavo Petro y ahora le reclaman que no les hayan dado aún puestos y mermelada”.
Motoa hizo la afirmación porque este jueves, Carlos Rivas, expresidente y actual ejecutivo de Fecode, dejó ver el malestar que tenían con Gustavo Petro porque los dejó por fuera del empalme presidencial. “Nos sentimos maltratados”, aseguró.
En otras palabras, los directivos de Fecode buscan una cercanía con el gobierno Petro y una participación que, en teoría, no estaría dentro de las funciones del sindicato de maestros más grande del país.
Esta posición ha llevado a distintos sectores políticos a pensar en cuál será el papel que asumirá Fecode en los próximos cuatro años. ¿Le marcharán a Gustavo Petro? ¿No volverán a hacer reclamaciones al Gobierno frente a la educación pública? Esas respuestas quedarán resueltas apenas el líder de izquierda asuma las riendas del país.