Un fin de semana sangriento se reportó en Colombia con más de diez personas fallecidas y las masacres y cuerpos desmembrados tienen consternada a la población nacional, que teme por esta oleada de violencia en el territorio.
La primera masacre se reportó el sábado 27 de agosto en la ciudad de Cúcuta, en Norte de Santander, específicamente en el barrio Pueblo Nuevo, donde cuatro hombres fueron atacados a bala a las afueras de un taller de mecánica.
El hecho ocurrió en la avenida 9 con calle 0, muy cerca de la terminal de transporte. De acuerdo con versiones preliminares, las víctimas fueron interceptadas y atacadas por hombres que se movilizaban en motocicletas.
“Cuatro personas fueron impactadas con armas de fuego, una falleció en el lugar y otras tres fueron trasladas a centro asistencial, pero lastimosamente allí fallecen. Con todo el personal de policía judicial e inteligencia estamos realizando la investigación este hecho que hoy enluta a la comunidad”, dijo el coronel Hilbar Alfonso Reyes, subcomandante de la Policía Metropolitana de Cúcuta (Mecuc).
Masacre en Barranquilla
La segunda masacre se reportó en Barranquilla, sobre la 1:00 p. m. en el barrio Montes, cuando dos hombres que se encontraban a las afueras del local Templo del Amor Night Club fueron atacados por un parrillero en moto.
El agresor arremetió contra estos accionando un arma de fuego en repetidas ocasiones. En el lugar fallecieron Jorge Eliécer Aguilar Quintero, de 54 años, y Carlos Julio Suárez Solano, de 68 años. Mientras que Ángel Mesías Alejandro, de 33 años, murió cuando recibía atención médica.
El ahora occiso Jorge Aguilar, según la Policía, presenta dos anotaciones por tráfico de estupefacientes en los años 2012 y 2017. Igualmente, las autoridades se encuentran investigando los hechos, debido a que el pasado 21 de agosto, el hermano de Jorge Aguilar fue asesinado en el mismo barrio.
Masacres en Nariño
La tercera masacre se reportó en Nariño entre los resguardos de Chiles y Mayasquer en zona rural del municipio de Cumbal al sur del departamento, donde -según el Movimiento de Autoridades Indígenas de Colombia (AICO)- fueron asesinados Adriana del Rocío Guerrero Tarapuez, excorregidora del resguardo de Panán, su pareja sentimental Stalin Emilson Calpa Tupue y el comunero Diego Armando España.
De acuerdo con esa organización, los tres comuneros fueron abordados por sujetos armados que les dispararon en varias oportunidades, causándoles la muerte de manera instantánea.
“La pérdida de estos valiosos seres humanos deja un gran vacío en sus familiares, amigos y comunidad, desde la cual lucharon por la defensa del territorio, la vida y la autonomía de los pueblos Pastos y Quillasingas”, señaló AICO en un comunicado.
La cuarta masacre reportada este fin de semana también ocurrió en Nariño, donde defensores de Derechos Humanos reportan el asesinato de cuatro personas en el municipio de Olaya Herrera en la costa Pacífica nariñense, en hechos que aún son materia de investigación.
“Una masacre en Olaya Herrera, donde mueren cuatro personas de sexo masculino, estamos a la espera de que las autoridades verifiquen los hechos y nos entreguen respuestas de estos dos hechos”, advirtió la promotora de DD. HH. Nelly Salas.
Así mismo, rechazó estos actos violentos y solicitó que se acate el llamado al desarme multilateral propuesto por el presidente Gustavo Petro en el puesto de mando unificado “por la vida”.
Cuerpos desmembrados
Este domingo 28 de agosto, residentes de la comuna 20 de Cali reportaron el hallazgo de partes de un cuerpo desmembrado, las cuales fueron metidas en bolsas plásticas negras. Las autoridades iniciaron la investigación.
El macabro hecho se descubrió en cercanías del puente Chiquinquirá, ubicado en el barrio Venezuela, en el sector de Siloé, hasta donde llegaron uniformados de la Policía a verificar la alerta de la comunidad.
“En la comuna 20 fueron encontradas partes de las extremidades inferiores de un ser humano. La Sijín hace el levantamiento cumpliendo un estricto protocolo y lo remite a Medicina Legal, con el fin de investigar a quién corresponden estos restos y si coinciden con los tejidos humanos hallados hace algunos días en el mismo sector”, dijo el secretario de Seguridad Distrital, Jimmy Dranguet.
De acuerdo con las autoridades, este es el segundo cuerpo desmembrado que se encuentra en esta zona en los últimos diez días. En las dos ocasiones han sido encontradas diferentes partes del cuerpo, por lo cual se investiga si pertenecen a una misma persona.
También este fin de semana en Buga, los ciudadanos que hacían deporte por un callejón en el sector de Palo Blanco alertaron a las autoridades al notar extremidades de un cuerpo humano cubiertas con bolsas de basura; ante este llamado, uniformados de la Policía llegaron al sitio y confirmaron que se trataba de un cuerpo desmembrado.
Por ahora, se adelantan las respectivas investigaciones, pero se presume que el cuerpo pertenecería a la cabeza humana que fue encontrada el sábado en horas de la noche, en plena vía del barrio Divino Niño de Buga, en la carrera 11 con calle 16.
“En estos momentos se está realizando el levantamiento del cuerpo. No se sabe si hace parte de la cabeza que se encontró; eso todavía es materia de investigación. En las próximas horas, el comandante de la Policía Valle, Ever Yovanni Gómez, dará las declaraciones oficiales”, le dijo a SEMANA la Policía del Valle.