En una completa ironía se convirtió la escena en la que el fiscal Daniel Hernández, el mismo que en la mañana de este miércoles presentaba los testigos contra el abogado Diego Cadena, en la tarde era acusado por su propio empleador, la Fiscalía. Hernández fue acusado por las supuestas presiones a Otto Bula, testigo estrella del caso Odebrecht.
La Fiscalía le imputó cargos a Daniel Hernández en una audiencia en la que no quedaron muy claros los hechos jurídicamente relevantes del proceso en su contra, pero que no fueron suficientes para evitar la acusación que hizo el mismo ente acusador en la tarde de este miércoles y que motivó una solicitud de la defensa del fiscal en el sentido de declarar la nulidad de todas las actuaciones en este proceso.
“Esta defensa, y es nuestro criterio, no se cumplieron los compromisos de legalidad y la Fiscalía no logró una respuesta coherente. Presentaremos la nulidad de las actuaciones a partir de la imputación de cargos que después de formulada la acusación simplemente se reiteran las observaciones y así corresponderá solicitar la nulidad a partir de la imputación de cargos”, dijo la defensa de Daniel Hernández.
El propio Daniel Hernández les dijo a los magistrados del Tribunal Superior de Bogotá, donde la propia Fiscalía le imputó cargos, que no fueron resueltas las dudas presentadas durante la misma diligencia, un argumento más para insistir en la nulidad de todas las actuaciones del ente acusador en su contra, tal y como lo pidió su defensa.
“No estoy conforme frente a las aclaraciones solicitadas a la Fiscalía, siguen siendo amigos y no a los hechos jurídicamente relevantes con la defensa técnica; nos sometemos a sus directrices, pero tener en cuenta las sentencias de la Corte que nos otorga esa posibilidad de nulidad… Que la Fiscalía pueda presentar su acusación y si no se resuelven los yerros que nos permitan la posibilidad de presentar la nulidad”, dijo el fiscal Hernández.
La defensa del fiscal Daniel Hernández fue más contundente al advertir que la Fiscalía utilizó contextos para contaminar el proceso y afectar así la credibilidad de su cliente, una razón más para insistir en la nulidad de todas las actuaciones que se adelantaron por parte del ente acusador desde la propia imputación de cargos.
“La Fiscalía tuvo que valerse de un indebido método de narrar contextos para contaminar el proceso con circunstancias que creerían ser extrañas. Si revisan el escrito de acusación, se darán cuenta de que se compone de evidencias documentales y testimoniales que son completamente impertinentes para los delitos imputados”, dijo el abogado defensor del fiscal.
Para la defensa del fiscal, la Fiscalía no cumplió con los requisitos mínimos y legales durante una imputación de cargos, al punto que no se refirió a los hechos jurídicamente relevantes, no lo soportó en debida forma y entregó un listado de pruebas que no se compadecen con la situación enunciada durante la imputación.
“Señores magistrados, en este punto se ha expuesto por qué la Fiscalía no cumplió con los requisitos de relación clara y sucinta de los hechos jurídicamente relevantes y por qué hasta para anular la Providencia del Tribunal este acto de parte y esta no es una decisión nueva”, dijo el abogado.