El contrabando que salía de Venezuela a Colombia incluyó chatarra, carne, queso, carros para chatarrizar, maquinaria y otros productos, de escasa calidad, lo hacían, con la anuencia de policías, desde octubre de 2019. La Fiscalía investigó y logró la captura de seis policías y siete civiles.

Se trata de una organización criminal que llevaba años utilizando los pasos fronterizos en Norte de Santander para convertirlos en corredores del contrabando, al punto de que lograron construir una ruta libre de retenes o puestos de control, justamente por la información y colaboración que brindaban quienes, en teoría, debían combatir ese contrabando, los uniformados ahora capturados.

“La investigación permitió conocer que, a través de pasos fronterizos clandestinos en Norte de Santander, la organización habría permitido el ingreso y salida de Colombia de chatarra, carne, queso, carros para chatarrizar, maquinaria, entre otros productos, desde octubre de 2019″, dijo la Fiscalía.

La investigación que adelantó la Fiscalía concluyó que la organización criminal, en compañía de los uniformados de la Policía en la San Faustino en zona rural de Cúcuta, garantizaron el paso de los productos de contrabando, claro a cambio recibían pagos millonarios por permitir el tránsito de la mercancía.

Los civiles que estaban al frente de esta operación sabían bien en qué momento debían acudir a los pasos fronterizos, justamente cuando los policías estaban a su servicio y no de la institución o del Estado. Los policías estaban muy atentos, no de identificar el crimen, sino de permitirlo.

“Un fiscal de la Dirección Especializada contra los Delitos Fiscales imputó a los detenidos, según el posible nivel de participación en las actividades ilícitas detectadas, los delitos de concierto para delinquir con fines de contrabando y cohecho, entre otros”, señaló Leonardo Quevedo Castillo, director contra los delitos fiscales.

Los procesados, según explicaron fuentes de la Fiscalía, no aceptaron los cargos imputados, sin embargo la contundencia del material probatorio fue fundamental para que un juez de control de garantías en Cúcuta, entendiera la gravedad de los hechos e impusiera una medida de aseguramiento en centro carcelario.

“La Fiscalía General de la Nación, en un trabajo articulado con la DIJIN de la Policía Nacional, identificó una red delictiva que estaría involucrada en contrabando desde y hacia Venezuela… Ante la contundencia del material probatorio aportado por el ente investigador el juez del caso impuso a todos los procesados medida de aseguramiento en centro carcelario”, dijo la Fiscalía.

La investigación, dijo el fiscal Quevedo Castillo, continúa en una segunda fase con el objetivo de establecer que otras personas, incluso funcionarios públicos, estarían comprometidos con esta red ilegal dedicada al contrabando. Se espera que los investigadores logren establecer otros elementos de prueba de cara a un eventual juicio contra los ahora judicializados.

La captura y judicialización de los policías, junto a los civiles involucrados en esta red de contrabando se suma a otros operativos liderados por la Fiscalía y la Policía, que justamente permiten la desarticulación de estas organizaciones, además de impactar las finanzas criminales que se derivan del contrabando. La Fiscalía incluso ha ocupado con finés de extinción de dominio los bienes de los cabecillas de estas organizaciones, son duros golpes a las redes de contrabandistas.