Casi dos años después de que un juez especializado declaró nula la imputación de la Fiscalía en contra de los directivos de CIJ Gutiérrez, una reconocida comercializadora oro en Medellín, el ente acusador hizo un nuevo intento por endilgar responsabilidad a la mismas personas y nuevamente un juez le dice a la fiscal del caso que no tiene las pruebas para imputar.
SEMANA conoció los detalles de esa audiencia y allí la juez le dice a la Fiscalía, en otras palabras, que no se trata de imputar por imputar. Que es necesario cumplir con los requisitos de ley, así se trate de un acto de mera comunicación. Advierte la juez que la Fiscalía no logró demostrar la vinculación de las personas con los hechos investigados.
“Acá hemos visto que a la Fiscalía se le ha dado la oportunidad, no una, sino dos veces para que procediera a subsanar dicho error; sin embargo, tenemos que decir que la Fiscalía no ha cumplido con ello, las conductas endilgadas por la Fiscalía fueron las de lavado de activos, concierto para delinquir agravado y enriquecimiento ilícito. Sobre lavado de activos, dice el ente acusador, que se trata de personas que tenían la representación legal de las empresas, bueno el contador y el revisor, que era porque tenía sus calidades en las empresas, o sea, es una responsabilidad objetiva”, dijo la juez.
Incluso, insiste la juez, que le dio dos oportunidades a la fiscal para explicar su imputación y adecuar los elementos de prueba a los requisitos que exige la ley, pero simplemente no lo logró. Además, aseguró la juez, que la Fiscalía no pudo tumbar la decisión de otro juez que hace dos años dejó sin efecto la primera imputación.
“Entonces el despacho extrañó ese tema de la organización, cuál era el papel de cada uno en esa organización y organización delictiva para qué, de lo escuchado en la audiencia resulta forzoso concluir que la irregularidad detectada y por la cual se nulito por parte del juzgado especializado no sea subsanado y al no estar subsanado, este despacho de control de garantías no puede avalar, ni acompañar este acto de imputación”, señaló la juez.
La Fiscalía apeló de inmediato la decisión de la juez mientras advirtió que cumplieron con la carga argumentativa, con las pruebas y con los elementos esenciales de la imputación de cargos. Apeló la fiscal, pero la decisión ya estaba tomada y perdió, otra vez, un round contra la multinacional CIJ Gutiérrez.
“Esta delegada sí cumplió con el acto de comunicación, incluso siendo llevada a ir mucho más allá porque me tocó indicar monto por año, por año de dónde procedía en los valores que se globalizan. Como usted comprenderá, señor juez de segunda instancia si estamos frente a una operación de lavado de activos cuyo análisis llevó 10 años, a mi me quedaba muy complicado, ha sido antitécnica la audiencia”, señaló la Fiscalía.
El asunto es muy inquietante, no solo por el llamado de atención que hace la juez, sino por las implicaciones que tiene el hecho de citar a imputación de cargos por segunda vez y en las dos ocasiones los jueces adviertan irregularidades de la Fiscalía. En síntesis, la Fiscalía no tiene las pruebas o la fiscal a cargo no tiene la experiencia para este tipo de audiencias.
Denuncias en la Fiscalía
SEMANA reveló un audio que detalla supuestas irregularidades a lo largo de esta investigación y que enredan a Luz Ángela Bahamón, directora de la Unidad Especializada contra las Finanzas Criminales de la Fiscalía. En el audio se escucha a la funcionaria mientras advierte y da órdenes a fiscales a su cargo para que adopten decisiones, incluso adelantan diligencias sin el lleno de requisitos legales.
- Investigadora: No, se van a pedir los más relevantes, para mirar.
- Bahamón: Por eso, mínimo son 60 días.
- Investigador 2: Quiero hacer una salvedad, todo eso que dijo el doctor, dijo: No quiero que digan que por mi recomendación el caso no sale. Esas son recomendaciones adicionales para ir con más fuerza, para ir más fuertes.
- Bahamón: Pues de alguna manera sí... Eso que se desechó... Eso lo desechamos hace marras.
Por estos hechos hay dos investigaciones, una en la Procuraduría, que ya cuenta con varias declaraciones que enredan aún más a la alta funcionaria de la Fiscalía, y otra, en el mismo ente acusador que apenas cuenta con la apertura formal.