SEMANA llegó a las entrañas de una red criminal dedicada a la explotación sexual de mujeres que se enquistó en la ciudad de Cartagena. Las víctimas permanecían encerradas, secuestradas y esclavizadas en pequeñas habitaciones en el interior de un establecimiento nocturno, cercano al barrio El Bosque.
La investigación que adelantó la Fiscalía y la Policía llevó a un importante operativo que en las últimas horas dejó la captura de 12 personas señaladas de participar, en diferentes roles, de la millonaria red de explotación sexual y trata de personas. Fueron las mujeres las que denunciaron, después de escapar de este antro de esclavitud.
Esas víctimas le contaron a SEMANA cómo llegaban a Cartagena con una supuesta oferta de trabajo y en la heroica les advertían que tenían que servir de meseras en un bar, luego aceptar relaciones sexuales y después permanecer privadas de la libertad mientras pagaban una millonaria deuda con los supuestos costos de viaje y sostenimiento.
“Uno trabaja toda la semana, nos permiten caminar por el sitio, por los tres pisos, pero mientras estamos durmiendo les ponen candado a las habitaciones… yo te digo, ahí lo que tenemos es una esclavitud, no te dejan salir”, le dijo a SEMANA una de las mujeres que, después de meses, logró escapar del cautiverio. Eso sí, sólo lo pudo hacer hasta pagar una deuda que se acumulaba con cada plato de comida.
En la segunda fase de la investigación la Fiscalía y la Policía llegó al antro que quedó en las cámaras de SEMANA mientras las mujeres estaban en este espacio, algunas negaban hechos de explotación, mientras que otras, off the record, narraban los vejámenes que padecían en este espacio, dedicado a la prostitución y la esclavitud sexual.
“La contundencia del material probatorio aportado por una fiscal del Centro de Atención Integral a Víctimas de Abuso Sexual (Caivas) de Cartagena, fue determinante para impactar y judicializar a una organización que estaría dedicada a la trata de personas, el constreñimiento a la prostitución y proxenetismo con menores de edad, que operaba en esa ciudad”, explicó la directora Seccional de Fiscalías Bolívar, Ibet Cecilia Hernández.
Señalaron desde la Fiscalía que las labores investigativas, que incluyeron seguimiento a personas, agentes encubiertos y declaraciones testimoniales, permitieron evidenciar la existencia de esta estructura delincuencial que contactaba mujeres con condiciones de vulnerabilidad para explotarlas sexualmente en los sectores del Centro Histórico, Bocagrande y la Bomba del Amparo, entre otros
“Se puso establecer, además, que la organización exigía a las trabajadoras sexuales 50.000 pesos cada vez que deseaban ejercer su labor en esos lugares y se quedaban con el 50 por ciento de lo que cobraban a los clientes. También se detectó que la red comercializaba con los potenciales clientes, en su mayoría turistas nacionales y extranjeros, la venta de estupefacientes”, advirtió el ente acusador.
Una fiscal de del Centro de Atención Integral a Víctimas de Abuso Sexual imputó los delitos de trata de personas, constreñimiento a la prostitución, proxenetismo, concierto para delinquir agravado, falsedad en documento público y falsedad personal. Los cargos no fueron aceptados, pero el juez entendió la gravedad de los hechos y ordenó que todos los capturados fueran enviados a una cárcel.