Varias semanas lleva Sneyder Pinilla haciendo fila en la Fiscalía para que estudien la posibilidad de un principio de oportunidad, de convertirlo en el testigo estrella del escándalo de corrupción en que se convirtió la compra de 40 carrotanques para llevar agua a La Guajira. Cuando hace las revelaciones en público, la Fiscalía responde con un llamado a la “prudencia”.

Resulta paradójico que, mientras el testigo ruega por ser escuchado, el ente acusador se instale en una tarima de consejos jurídicos y morales para “evitar presiones indebidas” a la justicia, cuando justamente era lo que buscaba el testigo: colaborar con la justicia.

“En ese sentido, se hace un llamado a la prudencia, a respetar el debido proceso que les asisten a los ciudadanos, y evitar presiones indebidas que afecten el normal desarrollo de la administración de justicia”, dijo la Fiscalía.

La Fiscalía advirtió que se adelanta una investigación en la Dirección Contra la Corrupción por los hechos denunciados con las irregularidades en la millonaria compra de los carrotanques de la UNGRD y, a partir de los elementos de pruebas, se están tomando las determinaciones del caso bajo los parámetros y “normas” del proceso penal.

“La Fiscalía General de la Nación informa que, por el momento, está en marcha una indagación a cargo de la Dirección Especializada contra la Corrupción con ocasión de los presuntos actos de corrupción en el contrato de suministro de carrotanques para llevar agua potable a La Guajira”, insiste la Fiscalía.

Olmedo López, exdirector de la UNGRD, y congresistas, en especial de la Cámara, serán salpicados.

Aseguraron desde el ente acusador que las investigaciones se adelantan de manera responsable, respetando el debido proceso y de ahí que resulta necesario hacer un llamado a la “prudencia” en aras de evitar esas presiones que podrían afectar el normal desarrollo de la justicia y, por tanto, los resultados de las indagaciones.

“De manera responsable y fiel a las normas del derecho penal, se avanza en la verificación de unos hechos, y se recopila el material probatorio y las evidencias suficientes para hacer las valoraciones legales de rigor que permitan establecer el tipo de delito que se podría configurar y quiénes serían los responsables”, dijo la Fiscalía a través de las redes sociales.

Mientras la Fiscalía solicita prudencia, los testigos en este proceso insisten en la necesidad de ser escuchados por el ente acusador, revelar la información que tienen y entregar los elementos de prueba que soportan sus denuncias, todo a cambio de unos beneficios por colaboración como es el principio de oportunidad.

La Corte Suprema de Justicia ya advirtió que se abrió una investigación contra los aforados que fueron salpicados en las revelaciones de SEMANA y que participaron de la maraña corrupta para entregar supuestamente millonarias sumas de dinero a los presidentes del Senado y de la Cámara de Representantes.

“La Sala de Instrucción abrió, de oficio, una indagación previa por las declaraciones que se han conocido por medios de comunicación en las que un exfuncionario de la Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres (UNGRD) hace señalamientos contra aforados”, señaló la Corte Suprema de Justicia.