Los fórmulas vicepresidenciales dieron hoy un espectáculo de argumentos y propuestas durante el debate de SEMANA y El Tiempo, en algunos casos con contradicciones y en otros con coincidencias, siempre con respeto y altura.
Fue la primera vez que Francia Márquez, fórmula de Gustavo Petro; Rodrigo Lara Sánchez, fórmula de Federico Gutiérrez; Luis Gilberto Murillo, fórmula de Sergio Fajardo; José Luis Esparza, fórmula de Ingrid Betancourt; Marelén Castillo, fórmula de Rodolfo Hernández y Carlos Cuartas Quiceno, fórmula de Enrique Gómez Martínez, aparecieron en grupo para confrontar y exponer sus argumentos.
Es un grupo muy diverso en el que hay un médico, un empresario, un militar retirado, un ambientalista, una experta en educación y una lideresa social, todos con alta formación académica, lo cual se reflejó en calidad de la discusión.
Fue notorio el marcado acento ideológico de unos y otros. Claramente Francia Márquez, con su inconfundible corte de izquierda, y los demás de centro y derecha.
Francia Márquez, la compañera de camino de Petro, hizo una de las principales diferencias en el debate, al señalar al Estado colombiano y al Esmad como responsables de asesinatos de jóvenes. Fueron las mayores condenas que la candidata a la Vicepresidencia hizo, no obstante que se abordó el tema de los terroristas y los narcotraficantes.
Señalar al Estado colombiano de “asesino” y al Esmad de ser una fuerza que “saca los ojos, asesina jóvenes y violenta los derechos humanos”, fueron algunas de las frases más duras que se escucharon en el debate y vinieron de la boca de Márquez.
Racismo
Una discusión sobre racismo se tomó el primer segmento de la discusión y casi todos coincidieron en que ese fenómeno sí se da en nuestro medio. Francia Márquez y Luis Gilberto Murillo -ambos afro- fueron los más enfocados en manifestar su rechazo a esas prácticas.
Márquez dijo que en Colombia hay un “racismo estructural” que violenta a las comunidades étnicas excluyéndolas de la atención de las necesidades básicas y dijo que el Estado tiene responsabilidad en esa situación.
“No es aceptable que todavía haya barreras para superar la exclusión racial en Colombia”, aseguró Murillo y dijo por ejemplo que en las Fuerzas Armadas hay un problema de representación de esas comunidades. Siempre se ha cuestionado por qué no hay afros en la alta oficialidad.
Murillo, quien ha sido ministro de Estado y gobernador (del Chocó), confesó que la razón por la que viste corbata es porque cuando va sin ella es objeto de acoso por parte de los policías, o de restricciones para ingresar a lugares como algunos espacios de Avianca, cuando va de viaje.
‘Estado asesino’
El primer enfrentamiento entre algunos de los precandidatos se dio por cuenta de la pregunta sobre cuáles son sus propuestas para combatir el terrorismo, fenómeno que cobró las vidas de dos niños en un atentado el pasado fin de semana en Bogotá.
Aunque en principio todos coincidieron en condenar el atentado, Francia Márquez hizo referencia a que también hay “niños asesinados por el Estado”.
Se refería a menores reclutados por las organizaciones criminales que han caído en acciones de la Fuerza Pública, pero que, según el DIH, son víctimas del delito de reclutamiento forzado.
Francia fue controvertida por José Luis Esparza, un militar retirado, fórmula de Ingrid, quien le reprochó el comentario. Le dijo que los asesinos son los grupos criminales, no el Estado.
La fórmula vicepresidencial de Petro negó que hubiera dicho lo que dijo sobre el “Estado asesino”.
Prácticamente todos los participantes en el debate, con algunos matices, estuvieron de acuerdo con la propuesta de implementar el Acuerdo de Paz de La Habana como un camino para poner fin a la guerra.
En esta discusión se fueron decantando con mucha claridad las posturas de izquierda y derecha.
Carlos Cuartas Quiceno, fórmula de Enrique Gómez -de Salvación Nacional-, expresó su rechazo a la idea de nuevos acuerdos de paz, como lo sugirió Márquez.
Desde su postura conservadora, Cuartas deploró que “la Fuerza Pública esté siendo diezmada como parte de una estrategia que pretende desinstitucionalizar al país” y rechazó la idea de que el terrorismo pueda ser utilizado para presionar diálogos políticos.
La fórmula vicepresidencial de Federico Gutiérrez, Rodrigo Lara Sánchez, recordó que votó a favor del acuerdo de paz en el plebiscito, pero dijo que el Estado debe responder con todas sus fuerzas a los criminales que pretenden intimidar a la población con acciones criminales.
Lara, un médico cirujano de profesión, que viene del centro del espectro político a acompañar a Federico Gutiérrez, dijo que grupos como el Eln y las disidencias de las Farc no pueden pensar que aquí hay un “Estado débil y arrodillado”.
Mayoría, en defensa del Esmad
Eliminar los Escuadrones Móviles Antimotines (Esmad) ha sido una propuesta de la izquierda en los últimos meses, sobre todo después del último paro nacional. A ello se han enfrentado los sectores de la derecha.
La izquierda señala al Esmad de atacar las manifestaciones pacíficas y la derecha ve esta fuerza como la protección contra las acciones de los vándalos y terroristas.
Solo Francia Márquez y Luis Gilberto Murillo dijeron que acabarían el Esmad, en un gobierno suyo. Los demás, aunque le harían reformas, lo respaldaron.
De nuevo Márquez fue muy crítica contra esta autoridad y dijo que “el Esmad es una fuerza que les saca los ojos a los jóvenes y los asesina”.
“El Esmad debe desaparecer”, dijo la líder afro del Pacto Histórico de manera categórica.
La afirmación de Márquez está enmarcada en las propuestas del Pacto Histórico. Gustavo Bolívar ha dicho que si Gustavo Petro es Presidente, uno de los primeros decretos que firmará será la abolición del Esmad.
Cuartas, el compañero de fórmula de Enrique Gómez, fue quien más duro reaccionó contra la propuesta de Márquez.
Murillo, en apoyo a Francia, dijo refiriéndose a la idea de eliminar el Esmad, que “ninguna institución debe ser intocable” cuando muestra su ineficacia.
“El Esmad como parte de la Fuerza Pública, es la fuerza del Estado que hay que proteger y darle todo el marco jurídico para que pueda operar. Si quieren acabar con el Esmad no les den trabajo, no vandalicen”, respondió Cuartas, quien representa a una de las fuerzas conservadoras que irá a primera vuelta.
Rodrigo Lara Sánchez secundó a Cuartas y dijo que “el problema no es la institucionalidad, la fortaleza de las instituciones es la garantía de los derechos”.
Y refiriéndose a la iniciativa de Márquez pidió de manera enfática “no debilitar más la democracia”.
La directora de SEMANA, Vicky Dávila, les preguntó a los asistentes si invitarían al jefe del Partido Liberal, César Gaviria, a sus proyectos políticos.
La pregunta tenía toda su justificación, por cuanto en las últimas horas Gaviria recibió al candidato Federico Gutiérrez y a emisarios de Gustavo Petro.
Los dos principales sectores en lucha por la Presidencia se disputan el apoyo de los liberales que obtuvieron más de dos millones de votos en las elecciones legislativas del pasado 13 de marzo.
Salvo Marelén Castillo, fórmula de Rodolfo Hernández y José Luis Esparza, fórmula de Ingrid Betancourt, los demás mostraron apertura a aceptar apoyos de otros sectores políticos.
La fórmula de Hernández reiteró lo que ha dicho el candidato y es que irá solo a la primera vuelta, sin alianzas.
Ni el sector de Ingrid Betancourt ni los de Centro Esperanza ven con buenos ojos a Gaviria.
Francia Márquez, cuyas críticas a César Gaviria provocaron la estampida del dirigente liberal, reiteró sus reparos al expresidente, sin mencionar su nombre. Dijo que las políticas neoliberales -aludiendo a Gaviria- tienen aguantando hambre a este país y que el “modelo neoliberal tiene que transformarse”.
Los aspirantes a la Vicepresidencia también hablaron de otros temas como pensiones, tenencia de la tierra, en los cuales también afloraron las posiciones de derecha e izquierda.