El pasado 3 de diciembre, dos hombres fueron secuestrados en Labranzagrande, Boyacá, por un grupo de delincuencia común organizado.

Uno de los secuestrados era José Bernardo Vivas Holguín, quien se dedica a acarreos y por quien pedían por su liberación inicialmente 30 millones de pesos, luego seis millones.

“Nos preocupa mucho lo ocurrido, porque en esta zona hacía mucho tiempo que no se registraban secuestros. Y nos preocupa porque en esa zona de Boyacá hace presencia el ELN”, dijo el gobernador de Boyacá, Ramiro Barragán, que no dudó en coordinar el operativo con el apoyo del Gaula, el Ejército y la Policía para devolver en estas fiestas decembrinas a los dos ciudadanos con sus familias.

Según informaron desde la Policía, la liberación se dio gracias a la presión de las autoridades. Según los familiares de la víctima, el canjeado llegó por sus medios a Duitama.

“Los diferentes sobrevuelos que se realizaron sobre la zona de injerencia, con el apoyo de un helicóptero de la Policía Nacional, así como las labores en tierra coordinadas entre el Ejército Nacional y la Policía, generaron la presión sobre estos delincuentes”, dijo la coronel María Margarita Mantilla, comandante de la Policía de ese departamento.

El otro secuestrado fue Luis Pérez Nossa, un ingeniero mecánico de 59 años. Por él pedían 40 millones de pesos. El hombre fue encontrado por un ciudadano en zona rural que lo entregó al Ejército y sus unidades.

“Estaban adelantando la búsqueda en la zona de San Ignacio, en el municipio de Mongua, Boyacá, siendo llevado a un centro asistencial para su valoración médica”, afirmó la comandante.

Fueron días de angustia para las familias que asistieron a la Iglesia Nuestra Señora del Rosario de Sogamoso para pedir por la pronta liberación de los hombres secuestrados.

El Gaula de la Policía destinó un operativo especial para capturar a los presuntos integrantes de la red. | Foto: Policía

El Gobernador de Boyacá no ocultó la felicidad de la liberación.

“La mejor noticia del día, la liberación de las dos personas que se encontraban retenidas por parte de un grupo delincuencial”, dijo.

Agregó elogios a la fuerza pública: “Dios bendiga a nuestros uniformados del Ejército y la Policía y a todos los organismos que trabajaron sin descanso en la búsqueda. A Luis Eduardo Pérez y a José Vivas, nuestro saludo, nos alegra enormemente que estén de nuevo con sus familias. Que jamás se vuelva a repetir este horror en nuestro departamento”, indicó.

El secuestro mantuvo en vilo a la comunidad, que fue la que alertó de los peligrosos secuestradores que armados llegaron hasta límites con Toquilla (Aquitania), detuvieron una camioneta Nissan Frontier para llevarse a Pérez Nossa y posteriormente una Chevrolet Dimax, para secuestrar a Vivas Holguín.

Según las primeras informaciones, los secuestradores no conocían el sector y fueron interceptados por la comunidad, que trató de impedir el secuestro. Uno de los habitantes de la zona fue herido con arma de fuego en una pierna.

Los secuestradores fueron cuatro, al parecer, dos conocidos con los alias de Fabián y El Cerrajero en el sector.

“Es importante recalcar que la comunidad jugó un papel muy importante en la liberación de estas personas. Nosotros, con nuestras unidades en tierra, pusimos un cerco. Seguimos en curso para capturarlos y judicializarlos”, indicó el coronel Mauricio Lucero, comandante de la Primera Brigada del Ejército Nacional en el departamento de Boyacá.