El general Eduardo Zapateiro se despidió de su vida militar este viernes. Lo hizo en una ceremonia, a la que asistió el presidente Iván Duque, en la Escuela General José María Córdova. Allí, Zapateiro dio un discurso eufórico y lleno de agradecimiento por lo que fue su carrera.
Sin embargo, donde habló con el corazón fue en la entrevista que le dio a la directora de SEMANA, Vicky Dávila. En esa conversación, el general, ya en retiro, no se guardó nada.
Por primera vez, contó la historia de por qué decidió publicar esa serie de trinos contra el entonces candidato Gustavo Petro, cómo tomó la decisión y por qué no lo consultó con nadie, como suele hacerse en esos altos cargos del Ejército.
Los trinos son el eje de su decisión de retirarse y se siente orgulloso de eso. “Me siento tranquilo. Me voy con el honor del deber cumplido. Lo hice en el momento en que debía. La decisión la tomé yo, yo fui el que dio el paso al frente, no me llamó el Gobierno a calificar servicios. No. Lo hice consciente y me siento orgulloso”.
Estas es la entrevista con el general Zapateiro:
El general cuenta el porqué de esa despachada contra el candidato favorito a ganar la presidencia. “Me tocó defender al Ejército en el momento en que me tocaba hacerlo, con principios y valores. Eso no se puede negociar. Toda Colombia sabe que fuimos maltratados por un tuit del entonces candidato Gustavo Petro, hoy presidente electo. A todos los colombianos les quiero decir que lo que hice fue por obligación moral y personal. Eso fue lo que me enseñaron mis padres y es el ejemplo que debo dejarles no solamente a mis hijos, sino al cuerpo de generales y a mis soldados”, señaló.
Petro había puesto un trino que decía lo siguiente: “Mientras los soldados son asesinados por el Clan del Golfo, algunos de los generales están en la nómina del Clan. La cúpula se corrompe cuando son los politiqueros del narcotráfico los que terminan ascendiendo a los generales”.
El general, cuenta, no pudo contenerse ante esa andanada: “Los generales no somos ningunos sinvergüenzas, ni estamos haciendo pactos con narcotraficantes, como el hoy presidente electo lo dijo. Los generales nos debemos a nuestra carrera, a nuestro pueblo, somos servidores públicos y eso no lo voy a aceptar ni lo iba a aceptar, dejar ese tuit, así como así”.
Zapateiro publicó entonces seis trinos. El más duro decía: “A ningún general he visto en televisión recibiendo dinero mal habido. Los colombianos lo han visto a usted recibir dinero en bolsa de basura”.
“Todos muy preocupados me decían: ‘mi general, esto puede costarle la carrera y meternos en problemas’. Les decía: ‘no se preocupen, a ustedes no los van a llamar a calificar servicios, es a mí. Me ponen estos siete trinos’. Los organicé ¡personalmente! y les dije: ‘publíquenlos’. Y así fue”, le contó el general a Vicky Dávila.
Desde el comienzo, el general sabía que las consecuencias eran irreparables. “Soy consciente de que no podía estar con el presidente electo y no voy a esperar a que me digan qué tengo que hacer. Soy un hombre bien formado. Mi padre era un gran médico, al cual siempre llevaré en mi corazón. Mi madre fue una docente que nos enseñó la dignidad, el honor y el carácter. Eso fue lo que hice y por eso pasé mi retiro. Se lo pasé al señor presidente el mismo 19 de junio, porque sabía lo que enfrentaba”, explica.
Zapateiro recuerda que, cuando todo pasó, fue muy criticado y muchos le dijeron que había atropellado la Constitución. Pero él no comparte esa apreciación. “Creo que hice lo correcto y me lo aplaude todo el cuerpo de generales, mis superiores, los sabios, los maestros y todos los que están por fuera siempre me estuvieron acompañando. Quiero agradecerles también a los coroneles, los sargentos y los soldados profesionales. Recibí mensajes diciéndome: ‘Mi general, gracias por defendernos, por poner sus intereses fuera de cualquier contexto y defender a la institución y a nosotros’. Eso fue lo que hice, lo que me inspiró, y son mis convicciones, y las convicciones no se negocian”.
En ese escenario, su retiro era más que obvio. Zapateiro, una vez elegido Petro, le envió una misiva en la que pedía su dimisión tras 40 años de servicio. “Me despediré del pueblo colombiano, agradeciéndoles a todos mis soldados por todo el trabajo”, aseguró.
En la misiva conocida por SEMANA, el oficial aseguró: “Con toda atención me permito solicitar al señor presidente de la República de Colombia el retiro del servicio activo de las Fuerzas Militares-Ejército Nacional por solicitud propia, de manera inmediata”, aseguró el oficial en esa carta.
El mayor general Carlos Iván Moreno Ojeda fue designado por el presidente Iván Duque como el comandante encargado del Ejército Nacional. Zapateiro asegura que no tenía otra salida. “No se concibe un comandante del Ejército que inicie a trabajar con un presidente, comandante supremo de las Fuerzas Militares, con el que haya tenido roces. Le haría daño a mi Ejército, al cual amo muchísimo”, agrega.
De igual forma, cree que si no se retiraba, el presidente ya posesionado lo habría llamado a calificar servicios. “No creo que un presidente vaya a trabajar con un subalterno que lo haya increpado y enfrentado. Yo no lo increpé, lo que hice fue defender a mi Ejército, al cuerpo de generales, a la cúpula, porque él se refirió a ella y a algunos generales. Somos 62 y algunos pueden ser 50, 40, 30. Los generales se respetan. ¿Sabe por qué? Porque no nacen de la noche a la mañana. El general es subteniente, teniente, capitán, mayor, teniente coronel, coronel y después, con la bendición de Dios y una reunión del cuerpo de generales, es que se define si uno es o no general. En ese momento han transcurrido casi 30 o 25 años de servicio”, agrega.
En la entrevista, Zapateiro cuenta lo que sucedió cuando puso esos mensajes. El presidente Duque fue el primero que lo llamó y le preguntó con quién había consultado esos trinos. “Con nadie, señor presidente, no necesito consultar mi respuesta a un trino que maltrata a la institución que estoy representando. La defendí, costara lo que me costara”, recuerda que le dijo en esa llamada.
Y aclara de nuevo que no consultó ni con el general Navarro, ni con el ministro de la Defensa, ni con el presidente, su comandante supremo.
El primer mandatario lo respaldó y solo atinó a decirle: “Eduardo, en próximas ocasiones tienes que buscar asesoría, dime, pregúntame, está Navarro, está el doctor Diego Molano”.
En su charla con Vicky Dávila, Zapateiro habló también de lo que significa la llegada de un exguerrillero al poder dentro de las fuerzas armadas, del nombramiento de Iván Velásquez, del informe de la Comisión de la Verdad y de los testimonios de los militares en la JEP.