Ciro Alfonso Gutiérrez Ballesteros, quien trabajaba en la Unidad Nacional de Protección (UNP), será extraditado a los Estados Unidos por su participación en el vil acto de terrorismo registrado en la tarde del 15 de junio de 2021, en la Brigada 30 del Ejército Nacional, ubicada en Cúcuta, y que dejó 44 personas gravemente lesionadas, entre ellos varios militares estadounidenses que se encontraban en un curso de capacitación.
González, según el expediente judicial, fue la persona que coordinó el ingreso cargado con explosivos en la Brigada militar. Por estos hechos, fue requerido por la Corte del Distrito Sur de Florida, en los Estados Unidos, por cargos relacionados con la utilización de arma de destrucción masiva, concierto para asesinar a miembros de los servicios uniformados, apoyo material a terroristas e intento de asesinato.
En el requerimiento se indica que Gutiérrez “junto con otros integrantes de un Grupo Armad Organizado (GAOR), ingresaron y detonaron un carro bomba en las instalaciones del Cantón Militar San Jorge en la Brigada 30 del Ejército Nacional sede Cúcuta, provocando varios heridos y daños estructurales”. POr estos hechos, fue capturado el 3 de marzo de 2022.
Casualmente, el pasado martes, Gutiérrez fue condenado a 33 años de prisión tras firmar un preacuerdo con la Fiscalía General. El funcionario de la UNP reconoció haber prestado vehículos de alta gama para las disidencias de las Farc que delinquen en la región bajo las órdenes de John Mechas.
En esa organización, Gutiérrez era conocido como Ciro y de la mano del capitán en retiro del Ejército, Andrés Fernando Medina, alias El Capi, planificaron y ejecutaron el ingreso del vehículo cargado de explosivos. En las pruebas se pudo ver que el mismo militar realizó trabajo de inteligencia ingresando sin problema alguna a la base militar, fijando los lugares para ubicar las cargas explosivas.
En uno de los videos grabados con su celular registró el movimiento de los militares estadounidenses que estaban en capacitación. “Mediando acuerdo común y con división de trabajo, correspondiendo a alias ‘Capi’, ser encargado de capacitación de los integrantes de la organización en temas relacionados con georreferenciación, uso de radios de comunicaciones, encargado de adquisición de armas para la organización criminal y de ejecutar atentados terroristas”.
Ciro fue el coordinador logístico, participando “en la planificación de atentados terroristas, consecución de material de intendencia, el componente logístico del que hacían parte estaban encargado de la adquisición de armas de fuego, material de intendencia, vehículos para diferentes delitos, servir como correos humanos, entre otros, concertados con miembros de la organización criminal denominada disidencia 33 (...) quienes de manera sistemática, organizada y funcional, vienen realizando una serie de hechos delictivos relacionados con narcotráfico, porte de armas de uso privativo y defensa personal”.
Por estos hechos fue vinculado a la investigación por terrorismo, homicidios a servidores públicos y civiles de manera sistemática. “(Esta) organización que se caracterizan por su capacidad resilente, y con el pasar del tiempo han mutado sus nombres, pero no su actividad ilegal, pasando por grupo insurgente y en la actualidad en forma indefinida y con vocación de permanencia en el tiempo, como estructura del crimen organizado”.
El Capi también será extraditado a los Estados Unidos. El militar también fue condenado en Colombia a 36 años de prisión tras reconocer su participación directa en estos hechos.