Un nuevo recurso presentó el exdirector del DAS, general (r) Miguel Alfredo Maza Márquez, para salir de la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP). El oficial en retiro pide que se desista de su sometimiento ante ese tribunal de paz al considerar que no cuenta con las garantías para dar su versión.
En la petición, la defensa de Maza Márquez cuestionó la decisión de la Sala de Definición de Situaciones Jurídicas de la JEP que rechazó su petición para salir de esa jurisdicción. En este sentido, considera que se le está obligando a comparecer en contra de su voluntad y aceptar su responsabilidad en los hechos que son materia de investigación.
Igualmente, advierte que se le categorizó como miembro de la Fuerza Pública, situación que va en contravía de la verdad puesto que su postulación se presentó como agente no estatal al ser el director del DAS. “La Sala le otorgó a mi representado una calidad personal distinta a la que determinó la condena en su contra, so pretexto de convertir su comparecencia en obligatoria, razón suficiente para que dicha decisión sea revocada”, señala la petición radicada por la defensa del general en retiro.
En este sentido, considera que se le está obligando a presentarse a declarar y aceptar su responsabilidad inmediata en el expediente que se adelanta por el exterminio de los integrantes del partido político de la Unión Patriótica (UP) en la década de los ochenta.
Para la defensa de Maza, la misma JEP se está contradiciendo puesto que en 2019 su sometimiento por el caso del magnicidio del candidato presidencial Luis Carlos Galán Sarmiento fue rechazado argumentando que no era un agente de la Fuerza Pública sino un tercero civil.
En noviembre pasado, Maza Márquez se negó a comparecer ante la Sala de Reconocimiento de la JEP aduciendo que se le estaban vulnerando sus derechos procesales y la legítima defensa. Esta situación puso en riesgo su continuidad en la jurisdicción especial al considerar que estaba incumpliendo los compromisos que había adquirido.
Maza fue vinculado a este expediente después que varios integrantes de las Autodefensas Unidas de Colombia (AUC) señalaran que desde el DAS se recolectó información privilegiada de los militantes de este partido político que se conformó tras un acuerdo de paz con el Gobierno y las Farc.
Estos datos le fueron entregados a los paramilitares que empezaron con los homicidios selectivos (entre ellos dos candidatos presidenciales) y amenazas a los integrantes de esta colectividad. Estas acciones llevó a la desaparición casi inmediata de este partido.
Varios integrantes se vieron obligados a buscar asilo político y ponerle punto final a sus actividades políticas. Los paramilitares aseguraron que los agentes del DAS también participaron en estas amenazas y hostigamientos, esto teniendo en cuenta que se les había adjudicado la seguridad y protección de los militantes de la UP.
Estos hechos se presentaron en el período en el que el general Maza estuvo al frente del DAS (1985-1991). Debido a esto fue convocado para que dé su declaración y entregue su versión sobre los hechos de los que habría tenido conocimiento o responsabilidad.
En la actualidad Maza Márquez se encuentra privado de su libertad en el Centro de Estudios Superiores de la Policía Nacional (Cespo) cumpliendo una condena de 30 años de prisión impuesta por la Corte Suprema de Justicia por su participación y responsabilidad en los hechos que rodearon el asesinato de Luis Carlos Galán Sarmiento registrado el 18 de agosto de 1988 en la plaza central del municipio de Soacha (Cundinamarca).
En el fallo se señala que Maza ordenó modificar el esquema de seguridad de Galán Sarmiento pese a las constantes amenazas que recibía el candidato presidencial por el Nuevo Liberalismo.