Tres días antes de firmarse el nuevo acuerdo de Paz con las Farc en el Teatro Colón, el Presidente de la República avaló la extradición de Segundo Alberto Villota, integrante de esa guerrilla, quien es solicitado por las cortes del Distrito Sur de La Florida y del Distrito Este de Texas. Por cuenta del proceso de paz, el caso de Villota acaba de quedar en un limbo jurídico y político y está a punto de convertirse en el primer tropiezo por el manejo del tema de extradición en el marco del acuerdo. El aval del Primer Mandatario deja a Villota con un pie en Estados Unidos, cuando uno de los puntos más importantes para ese grupo guerrillero de lo pacto en La Habana era que precisamente los miembros de esta guerrilla no podrán ser extraditados. Puede leer: Los peros de la Corte Suprema frente a la Jurisdicción Especial para la PazSegundo Villota fue capturado en Ecuador por ser socio de Fernain Rodríguez Vásquez, a quien el Departamento del Tesoro de EEUU acusa de ser un capo internacional vinculado a las Farc y a los carteles mexicanos de Los Zetas y Sinaloa. Villota fue incluido en la “lista negra” de narcotraficantes por trabajar para esta red, que exportaba a Estados Unidos hasta 100 toneladas de cocaína al año, y que tiene como jefe máximo un capo colombiano-libanés Jorge Fadlallah Cheaitelly. Después de su captura fue traído al pabellón de extraditables de La Picota, en Bogotá. Meses después, la Corte Suprema de Justicia dio luz verde a su extradición a los Estados Unidos. Desde ese momento, y en el marco de las negociaciones con las FARC, Villota ha pedido que se considere su condición de integrante de esta guerrilla. Para esto solicitó que se constaten sus condenas por rebelión y que se pida copia del censo nacional de presos políticos de las FARC a la Corporación Solidaridad Jurídica. La extradición es una facultad del Presidente de la República y por eso el tema generará discusiones con ese grupo insurgente. El pasado 21 de noviembre, el gobierno la avaló en el caso de Villota, después de verificar que no es desmovilizado, no está postulado a la Ley de Justicia y Paz y no está acreditado como miembro del grupo armado ilegal.En la resolución, el Ministerio de Justicia, -quien se encarga de la verificación del trámite legal-, indica que con la información allegada no es posible para el Gobierno hacer alguna valoración sobre su condición de guerrillero. Explica además que elevó la consulta a la Oficina del Alto Comisionado para establecer si Segundo Villota, alias “Pastuso”, es o no integrante de las FARC.“A la fecha la Oficina del Alto Comisionado para la Paz no ha recibido listado alguno de parte de miembros de las FARC reconocidos por el Gobierno Nacional en la que reconozca la calidad de miembro de dicha agrupación armada al señor Villota”, responden. Sin embargo, Semana.com conoció un oficio, radicado el 23 de noviembre en la Oficina del Alto Comisionado, en el que el jefe del Equipo Negociador de las FARC Iván Márquez y Mauricio Jaramillo, miembro del Secretariado Mayor, acreditan la pertenencia de Villota a las FARC, junto con un listado de siete guerrilleros requeridos por Estados Unidos.Dicho documento, en cumplimiento del acuerdo de paz, se expide como una “entrega parcial” de información en la elaboración del listado de los integrantes de las FARC. Estas entregas se podrán hacer hasta el día D+180, cuando mediante un Acto Administrativo final se conocerá la lista definitiva de integrantes de las FARC. Jhon León González, de la Corporación Seguridad Jurídica, que acompaña los procesos judiciales de los guerrilleros recluidos en cárceles, aseguró que las FARC han venido haciendo reconocimientos parciales y pidiéndole al Gobierno que se “abstenga de emitir conceptos favorables sobre integrantes que las FARC reconocen dentro de su organización”. Sin embargo, “el Gobierno no ha respondido, al menos en lo que tiene que ver con los extraditables”, dice.Le recomendamos: Así le ha ido a los ‘narcos’ colombianos en Estados Unidos Aunque Villota intentó que su caso se asemejara al Juan Vicente Carvajal Isidro, a quien el Gobierno en diciembre del año pasado le suspendió la entrega a EEUU en el marco de las negociaciones, Carvajal tenía tres condenas que incluían el delito de rebelión como miembro de las FARC. Villota, aunque tiene procesos pendientes, no tiene sentencia. El oficio de las FARC también pide que se incluyan dentro del listado de integrantes a Fabio Fernando Cortés Molineros, Jairo Valencia Mina, Octavio Orrego Sánchez y a Ismael Enrique Peñalosa Mendoza. Todos recluidos en La Picota a la espera una decisión definitiva en su trámite de extradición. También hace referencia a Carlos Eyder Paz Utima, quien hace un mes fue extraditado y extraoficialmente se ha conocido que las FARC están pidiendo su repatriación a Colombia. La Oficina del Alto Comisionado fue consultada sobre el caso de Villota pero aún no se pronuncia sobre el tema.