Las disidencias de las Farc Iván Ríos y Rafael Aguilera fueron impactadas fuertemente en sus finanzas con la destrucción de diez laboratorios para el procesamiento de cocaína instalados en zonas selváticas del Pacífico colombiano.
La destrucción de estos laboratorios fue posible por medio de varios operativos adelantados por tropas de la Armada en esta zona del país. La institución detalló que adelantó varias operaciones de registro y control en diferentes sectores del municipio de Tumaco, Nariño, donde fueron encontrados y clausurados ocho de estos laboratorios.
En estos laboratorios ubicados en Tumaco encontraron 1.345 galones de base de coca en proceso, 1.020 kilogramos de hoja de coca picada, 151 galones de combustible, 659 galones de insumos líquidos y 219 kilogramos de insumos sólidos.
Los dos laboratorios restantes fueron encontrados en jurisdicción del municipio de El Charco, Nariño, y Guapi, Cauca. En ellos hallaron un total de 915 galones de base de coca en proceso y 625 kilogramos de hoja de coca picada.
“Los diez laboratorios, los insumos y la maquinaria empleada para la producción del narcótico fueron destruidos de forma controlada de acuerdo con los protocolos establecidos en coordinación con la Fiscalía General de la Nación”, precisó la Armada. Los operativos no dejaron capturas.
De acuerdo con la institución naval, las disidencias Iván Ríos y Rafael Aguilera sufrieron pérdidas millonarias con la destrucción de los laboratorios, pues el narcotráfico es una de sus principales fuentes de financiación. Las pérdidas fueron tasadas en más de 857 millones de pesos.
Incautan droga en el Pacífico
Recientemente, en aguas del Pacífico, aproximadamente a 36 millas de Isla Ajicito, en el Valle del Cauca, unidades de la Armada interceptaron una embarcación sospechosa. Al revisar la motonave, hallaron grandes cantidades de marihuana y cocaína que iban a ser enviadas desde este epicentro del tráfico de drogas a Centroamérica.
La embarcación iba tripulada por cuatro personas, entre ellos dos ciudadanos extranjeros –un nicaragüense y un costarricense– y dos colombianos, quienes tenían la misión de llevar los estupefacientes, por encargo de la disidencia Jaime Martínez de las Farc, hasta Costa Rica, donde serían recibidos por diferentes carteles de narcotráfico.
Fueron encontrados en la motonave 35 costales con 850 paquetes rectangulares, que posteriormente serían revisados,14 canecas que contenían 770 galones de combustible y equipos de comunicación. Al regresar a tierra firme, un equipo del Cuerpo Técnico de Investigación (CTI) de la Fiscalía General de la Nación, realizó pruebas al contenido de los paquetes, constatando que se trataba de marihuana y cocaína.
En total, los traficantes llevaban 511 kilogramos de marihuana y 374 kilogramos de cocaína, avaluados en 15 millones de dólares en el mercado ilegal internacional. Según la Armada, con la incautación de estos estupefacientes se evitó la circulación de más de un millón de dosis de droga.
Estos 875 kilogramos de estupefacientes, el combustible y la embarcación fueron entregados a la Fiscalía como parte de la investigación de los hechos. De igual manera, los cuatro tripulantes de la motonave quedaron a disposición del ente para que respondan ante la justicia.
En lo corrido de este año, la Fuerza Naval del Pacífico de la Armada ha incautado más de 102 toneladas de cocaína y 34 toneladas de marihuana.