El presidente Iván Duque fue premiado este 27 de junio con el Premio al Liderazgo Planetario 2022, entregado por la National Geographic Society, por sus esfuerzos para proteger el 30 % de las áreas marinas de Colombia. El expresidente de Costa Rica, Carlos Alvarado, también fue condecorado con este honor.
El premio fue dado al presidente Duque en medio de la Conferencia de los Océanos de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), que se celebró en Lisboa, y según la consejera delegada de la National Geographic Society, Jill Tiefenthaler sus “palabras, decisiones y acciones” para “crear soluciones sostenibles” fue el mayor argumento que tuvieron en cuenta para premiar a ambos políticos.
“Recibimos con honor, en nombre de Colombia, el Premio al Liderazgo Planetario 2022 que nos otorga National Geographic, que reconoce compromisos y decisiones en la protección de los océanos y destaca la declaratoria del 30% de zonas protegidas marinas en 2022. Este es un legado para el mundo”, destacó el mandatario en su cuenta de Twitter.
Asimismo, explicó que “no podemos proteger lo desconocido y tenemos que mostrar por qué estos corales generan vida; es proteger la sostenibilidad de los océanos y que las personas entiendan que hay muchas formas de economías sostenibles que generan bienestar para las comunidades y el medioambiente”.
Por otra parte, Duque aseguró que “en Ocean Night de National Geographic reiteramos que nuestro país es verde y con una riqueza marina en sus 900 mil km2 de aguas territoriales”. De acuerdo con el primer mandatario, esta estrategia demuestra que “proteger el océano es proteger la biodiversidad”.
“Por esto, nuestra decisión es que en 2022 declaramos el 30% de nuestro territorio como áreas protegidas”, añadió.
La emergencia mundial en los Oceános
En medio del evento de la ONU, el secretario general de esta entidad, Antonio Guterres, dijo que el mundo enfrenta una “emergencia” en los océanos que amenaza a la naturaleza y a la humanidad.
“Hoy nos enfrentamos a lo que yo calificaría como una emergencia en los océanos”, dijo al inicio de la plenaria. “Tenemos que cambiar de rumbo”, agregó.
Organizada de manera conjunta por Portugal y Kenia, la conferencia de la ONU sobre los océanos -prevista en principio para abril de 2020 y postergada a raíz del covid- reúne durante cinco días a miles de representantes de gobiernos, empresas, instituciones científicas y oenegés en busca de soluciones.
De un monto de cerca de 35.000 millones de dólares, las subvenciones que alientan la sobrepesca serán seguramente criticadas con dureza en Lisboa, a pesar de los primeros pasos dados la semana pasada por la Organización Mundial del Comercio (OMC) con vistas a una prohibición parcial.
Pero, entre tanto, la acidificación de los océanos provocada por el CO2 y las olas de calor marino, que pueden durar varios meses, continúan matando a los arrecifes de corales, de los cuales dependen un cuarto de la vida en el mar y unos 250 millones de personas.
Con propuestas que van del reciclaje a la prohibición total de las bolsas de plástico, este tipo de contaminación también estará en el programa de la conferencia, con el objetivo de invertir las tendencias actuales según las cuales los océanos tendrán hacia 2050 tantos plásticos como peces.
Desde los buques factoría asiáticos que recorren alta mar hasta los barcos de pesca artesanal que navegan el litoral de los trópicos, la pregunta de saber cómo avanzar hacia una pesca duradera será otro de los temas de debate en Lisboa.
La conferencia podría permitir establecer que la producción de pesca en mar abierto, en baja desde los años 1990, está siendo superada por la de la acuacultura, con unos 100 millones de toneladas anuales procedentes de cada uno de ellas.
*Con información de AFP.