Mompox amaneció hecha una caldera este viernes. Allí se encontraban reunidos los 32 gobernadores del país para elegir al nuevo presidente de la Federación Nacional de Departamentos, el encargado de ser el interlocutor entre el gobierno nacional y los entes territoriales. Aprovechando esa cumbre, el presidente Iván Duque había confirmado su presencia, una vez se hubiera resuelto esa elección. Sería la primera reunión del jefe de Estado con los mandatarios regionales. Contrario a lo previsto, los gobernadores no pudieron elegir al presidente de la federación. Dos candidatos los tenían divididos. Por un lado, el conservador Carlos Camargo Assís, ex magistrado del Consejo Nacional Electoral, contaba entre otros respaldos con el de Álvaro Uribe, uno de los protagonistas tras bambalinas de esta elección. Del otro, expresidente del Senado y ex del partido de la U, Mauricio Lizcano, con el espaldarazo de Germán Vargas Lleras, jefe natural de Cambio Radical.En contexto: Vargas o Uribe: pulso por la Federación de departamentosDuque llegó al mediodía a Santa Cruz de Mompox, la única ciudad colombiana en ser declarada patrimonio de la humanidad por la Unesco. Y para su sorpresa, los gobernadores no habían elegido a quien sería en adelante su interlocutor con la Casa de Nariño, o “Casa de los colombianos”, como la ha venido llamando el presidente en recientes discursos. Desde las nueve de la mañana, se comenzó a librar un pulso por la presidencia de la Federación, una entidad poco conocida por la opinión pública, pero que fue creada hace 14 años para fortalecer las entidades territoriales, y que por su autonomía presupuestal, se ha convertido en un botín que seduce a todos los políticos.La candidatura de Lizcano estaba impulsada por un poderoso bloque liderado por la gobernadora del Valle Dilian Francisca Toro y el gobernador del Huila Carlos Julio González (presidente encargado de la Federación), cercanos a Germán Vargas Lleras, además de los gobernadores de Antioquia y Cauca. Parecía tener las mayorías aseguradas, pero a la hora de la verdad la decisión del partido del ex vicepresidente de declararse bancada independiente, motivo al gobierno y a incidir en la decisión. Camargo, que llegó con el respaldo de los gobernadores de Atlántico, Bolívar, Sucre, Boyacá, Santander y Putumayo, en el papel, saldría favorecido. La pelea por los votos fue intensa, que los gobernadores optaron por aplazar la elección debido al inminente aterrizaje del presidente de la república. Duque, que había pedido “humo blanco” antes de instalar la cumbre y aguardó en el avión presidencial los resultados. Al ser enterado de la situación se dirigió al lugar donde estaban reunidos los gobernadores, y en los 27 minutos que duró su visita a la cumbre, dio un mensaje como para inclinar la balanza entre Camargo y Lizcano. El pasado lunes, al posesionar a Carlos Felipe Córdoba (casualmente expresidente de la Federación de Departamentos) como contralor general de la república, el presidente Duque sacó pecho por no haber incidido en su elección, como suele ser tradición de los jefes de Estado.Puede leer: Nunca usé el poder presidencial para la elección de contralor dice Duque“Era una tradición en nuestro país que el Poder Ejecutivo estuviera tras bambalinas tratando de inclinar la balanza en favor de uno u otro candidato. Esas reflexiones nunca pasaron por mi cabeza porque siempre he creído que el Gobierno no puede ser el que incline la balanza para definir quién es el que ejerce el control fiscal (...). Yo tengo la tranquilidad de decirle a los colombianos que jamás traté de usar el poder presidencial para su elección”, dijo el presidente Duque el pasado 3 de septiembre al tomar el juramento del contralor.Este viernes, de forma sutil, y cuando cumplía su primer mes de gobierno, Duque dio su primer guiño como presidente, el cual podría inclinar la balanza en la elección del presidente de la federación de departamentos. Duque, como de costumbre, saludó a cuantos estaban en su camino. Le dio un abrazo a Carlos Camargo, y un respetuoso apretón de manos a Lizcano. Después, ya en el atril, el presidente mencionó con nombre propio a los 32 gobernadores del país, a los senadores Honorio Henríquez y Fernando Nicolás Araújo (Centro Democrático), y a los representantes Enrique Cabrales, Emeterio Montes (Conservador), Hernando José Padaui (Cambio Radical). Pero luego, al extender su saludo a otros asistentes dijo: “... quiero saludar al exmagistrado Carlos Camargo, quiero darle un saludo a los señores excongresistas que están hoy acá con nosotros”. El nombre de Mauricio Lizcano nunca lo mencionó.
Los gobernadores asumieron ese mensaje como el guiño que reclamaban para definir la elección. En el discurso de Duque también hubo otro mensaje: “Esta Federación está en mi corazón, quiero tener siempre las mejores relaciones con la Federación de Departamentos por lo que representa para Colombia, que haya una interlocución fraterna, cercana con el Gobierno, que sea un punto de encuentro en las relaciones nuestras con todos ustedes”, dijo Duque.Después que el presidente bajó del atril, algunos gobernadores lo abordaron para aprovechar unos segundos y mencionarles algunos requerimientos de sus respectivos gobernadores. Según testigos, el presidente reclamó gestos de amistad, como la elección de un presidente de la federación que fuera amigo del gobierno. El alto consejero para la política, Jaime Amín, el hombre que maneja el computador de palacio, estuvo activo en la cumbre y abordó a los gobernadores para hacer efectivo el respaldo.
La foto oficial de la cumbre de gobernadores con el presidente Iván Duque. Mompox (Bolívar). Foto: PresidenciaEn Mompox se interpretaron estos episodios como un mensaje en favor de la candidatura de Camargo, quien por su origen y antecedentes estaría más cercano al gobierno. Camargo tiene carnet del Partido Conservador, que esta semana se declaró partido de gobierno. Punto que lo acerca a Duque. Y como magistrado del CNE fue quien presentó la ponencia para archivar la investigación contra la campaña presidencial de Óscar Iván Zuluaga por ingreso de dineros de Odebrecht, campaña de la que Duque hizo parte. Lizcano, por el contrario, pasó del uribismo al santismo como senador del partido de la U, pero en el reciente debate electoral hizo parte de la campaña de Germán Vargas Lleras, cuyo partido Cambio Radical se declaró en independencia frente al gobierno. Duque se marchó de Mompox y los gobernadores intentaron repetir la elección del presidente de la Fededepartamentos, pero decidieron aplazarla para el próximo martes, cuando vuelvan a reunirse, esta vez en Bogotá. El día en el que Duque cumplió su primer mes de gobierno, hizo su primer guiño como presidente. El poder presidencial del que habló en la posesión del contralor, sería decisivo.