Gustavo Petro tenía este domingo una de sus citas señaladas de la campaña. Un recorrido por varios municipios del norte de la sabana de Bogotá que culminó en Zipaquirá, su segunda patria chica. Ese municipio famoso por su catedral de sal y donde todo empezó para el candidato de la Colombia Humana. Allí se graduó de bachiller, allí comenzó su carrera política.Puede leer: Iván Duque y Gustavo Petro lideran nueva encuestaFue en ese municipio donde sus padres buscaron fortuna a comienzos de los años 70, dejando atrás Ciénaga de Oro, el municipio cordobés donde nació Gustavo Petro. El Colegio Nacional Juan Bautista de La Salle fue donde el hoy candidato presidencial completó su bachillerato. Un colegio de curas, simpatizantes del franquismo, y donde se “hablaba pestes” del comunismo.En contexto: 19 de abril, una fecha que marcó por partida doble a Gustavo PetroEn Zipaquirá también se graduó Gabriel García Márquez, otro costeño cuya familia emigró al interior del país. Petro le rindió homenaje al bautizar con el nombre del nobel un centro cultural, en épocas donde también había fundado un periódico llamado Carta al pueblo. Pero quizás, la huella que dejó Petro en el municipio cundinamarqués está en el Bolívar 83, un barrio que fundó y ayudó a construir con varios militantes y simpatizantes del M-19, la guerrilla que en aquel entonces más preocupaba al Estado. Cinco carreras y cuatro calles, más de 400 casas en un lote llamado El Cedro que pertenecía a los curas, y que terminó albergando a cientos de familias de escasos recursos.
Petro también fue personero y concejal de Zipaquirá, sus primeros cargos públicos. Y en 1985 fue capturado precisamente cuando se refugiaba en una de las casas de ese barrio que ayudó a levantar. Este domingo, casi 20 años después, el candidato de la Colombia Humana volvía a jugar de local en Zipaquirá. No desaprovechó la condición de estar en su feudo para lanzarle dardos a sus adversarios: Germán Vargas Lleras, Enrique Peñalosa, pero sobretodo a Álvaro Uribe y su candidato presidencial Iván Duque.Contra Uribe Al alcalde de Bogotá, del que es uno de sus principales opositores, le advirtió que si llega a la presidencia no le permitirá urbanizar la reserva van der Hammen, en el norte de la capital, y propuso materializar la idea que tuvo en la alcaldía de un tranvía por la carrera séptima que permitiera conectar el centro de la ciudad con los municipios del norte de la sabana, como Zipaquirá. Aseguró que tumbar árboles para ampliar en un carril la autopista norte es la peor decisión que se ha tomado.Le recomendamos: Petro a Uribe, un desafío a ritmo de acordeónSin embargo, como viene siendo habitual en la campaña, Petro enfiló la mayoría de dardos a Uribe, y este domingo en Zipaquirá anunció que una de las primeras decisiones que adoptaría de llegar a ser presidente sería derogar la reforma laboral que quitó las horas extras y modificó las condiciones contractuales.
Recordó que en 1990 Uribe era senador e impulsó la ley 50 que reformó el Código Sustantivo del Trabajo, y que en su criterio fue la que cambió el precepto de que la jornada laboral terminara a las 6 de la tarde, que los domingos y festivos dejaran de tener recargo, y que los contratos ya no fueran a tiempo indefinido sino a tres meses, contratos que calificó como “basura”.Confidencial: 2 datos sobre Petro“Si Petro es presidente, la reforma laboral de Uribe se deroga”, dijo. “Eso significa que el día vuelve a ser hasta las 6 de la tarde, la semana laboral vuelve es hasta el viernes, y la la jornada diaria vuelve a ser de 8 horas”.
En el pueblo donde se graduó de bachiller y donde comenzó su carrera política, Petro se comprometió a un nuevo hospital público, a que todos los jóvenes accederían a una educación superior gratuita y con calidad, y a que el municipio no sería avasallado desde la capital, como dijo que pasó en Mosquera: "los hijos Uribe le robaron al municipio de Mosquera cincuenta mil millones de pesos".