El candidato del Pacto Histórico admitió que su hermano, Juan Fernando Petro, se reunió con Iván Moreno Rojas, condenado a 14 años de cárcel por el millonario robo a Bogotá cuando su hermano Samuel Moreno era el alcalde de la capital, en medio del denominado ‘carrusel de la contratación’.

Los interlocutores de Gustavo Petro, que su hermano Juan Fernando visitó en la cárcel La Picota, para hablarles del llamado “perdón social”, son exfuncionarios públicos condenados por corrupción, pero con influencia sobre electores.

Petro dijo que Moreno “no es narco, no es parapolítico” y que “fue corrupto”.

En todo caso, Moreno todavía no ha terminado de pagar la pena por la que fue condenado.

Petro explicó que Moreno “está en un proceso muy interesante desde el punto de vista personal. Lo que Moreno nos ha sugerido ―agregó― es ser constructor de algo que he propuesto que se llama el perdón social y eso se está discutiendo dentro de las cárceles”.

En esta primera afirmación del candidato del Pacto Histórico hay varios aspectos que, según sus críticos, necesitan más explicación: el autor de la propuesta es Petro, pero Iván Moreno “ha sugerido ser constructor” de la iniciativa, y el perdón social “ya se está discutiendo en las cárceles”.

¿Moreno propuso ser “constructor” de la idea o Petro le encomendó la misión con su hermano? ¿Quién está liderando la “discusión en las cárceles? ¿Hay acaso una oferta de Petro a través de emisarios suyos en las cárceles de que si es elegido Presidente los perdonará? ¿El objetivo es lograr los votos de los corruptos condenados para su campaña presidencial?

Este tema del “perdón social” ya había sido mencionado por Petro hace un mes. “Nosotros vamos a brindar las opciones desde el 7 de agosto de un perdón social, que incluye desde Uribe hasta el ELN. No nos interesa iniciar nuevos ciclos de violencia, sino terminarlos todos y de manera definitiva. Queremos que ya no exista insurgencia armada contra el Estado, ni narcotraficantes al lado del Estado”, dijo el candidato durante un acto de campaña en Riohacha.

Según el diario El Colombiano, Petro se habría reunido ya con otros políticos corruptos en prisión para plantearles el “perdón social”, lo cual coincide con la afirmación del candidato, en el sentido de que en las cárceles el tema ya está en “discusión”.

Petro habría establecido contacto también con Manuel Carebilla, exgobernador del Amazonas; Jimmy Díaz Burbano, exgobernador del Putumayo, y con Óscar Rodríguez y Javier Zapata, exgobernadores de Guainía.

En un debate reciente, Petro aludió al tema, pero no ha explicado bien su propuesta.

Lo que sí se sabe es que el “perdón social” de Petro, por ahora, estaría dirigido a reconocidos corruptos condenados, que en el pasado manejaron grandes electorados.

Hasta ahora no se sabe que las conversaciones de Petro con los reos en las cárceles se haya extendido a autores de otros delitos como potenciales beneficiarios del “perdón social”.

“¿Por qué el hermano de Petro estaba en La Picota convenciendo a los ‘parapolíticos’ a mover votos para él a cambio de reformas a la Justicia?”, preguntó el expresidente Álvaro Uribe, en un trino.

El hermano de Petro, que habló con los reos en La Picota, le respondió a Uribe que estaba en una “agenda de ‘paz’”. Y le replicó: “¿Porque usted le tiene tanto miedo y odio a la paz? Si es lo que el pueblo pide”.

La respuesta de Juan Fernando Petro supone entonces que su hermano, si llega a la Presidencia, ¿hará la paz con los corruptos?