SEMANA: ¿Tiene una gran responsabilidad con los habitantes de los municipios del Atlántico, considerando el apoyo masivo que recibió en las urnas? Elsa Noguera: La responsabilidad es muy grande y estoy honrada con el respaldo de casi 700.000 atlanticenses. Por eso, hemos conformado un equipo de trabajo con los mejores profesionales, con experiencia y sólidos principios éticos para poder ejecutar todo el programa de gobierno que propusimos en campaña. Si las expectativas de la gente son grandes, las mías son aún mayores. SEMANA: ¿Qué significó realizar el acto de posesión en Tubará, un municipio que normalmente no está en la agenda principal? E. N.: Lo primero que queríamos era enviarles un mensaje a los municipios de que creemos en el gran potencial que tienen, especialmente en la zona costera, porque una de las grandes apuestas productivas es el fortalecimiento del turismo. Pero lo mejor fue estar acompañada de los acaldes de los 22 municipios del departamento.  SEMANA: Hablemos del programa de gobierno. Ya anunció una red de colaboradores que ayudarán a conocer las necesidades de la gente en materia de salud, ¿será eso suficiente para mejorar el servicio que hoy tiene tantas dificultades? E. N.: Queremos una verdadera transformación en la materia. Que la gente pueda acceder realmente a un servicio oportuno y de calidad. Que a los abuelitos les atiendan las urgencias enseguida, que las embarazadas puedan tener a sus hijos en el propio municipio y que a todos les entreguen sus medicamentos. Para esto vamos a conformar un ejército de 500 guardianes de la salud, todos técnicos adscritos a la secretaría, quienes irán de casa en casa para ser mis ojos y mis oídos en los municipios, corregimientos y veredas. SEMANA: ¿Y qué va a hacer con el Hospital Cari que cada vez que parece que va a funcionar bien vuelve y se enreda? E. N.: Para dar un buen servicio es fundamental recuperar financiera y técnicamente los hospitales departamentales y municipales, y los puestos de salud. Conformar una única red prestadora de servicios que garantice al usuario como el centro. No solo con el Cari, sino con todos los demás, se tomarán las medidas necesarias, bien sea la liquidación, la reestructuración o el restablecimiento de la solidez financiera. Pero lo que no podemos perder de vista es que lo importante es la gente.  SEMANA: Después de décadas de anuncios, el sector agrícola del Atlántico no se ha podido reactivar. ¿Cuál es su plan para lograrlo? E. N.: Queremos consolidar al Atlántico como una verdadera potencia agroindustrial, aprovechando que tenemos una muy buena interconexión vial, portuaria y aeroportuaria. Tenemos el río Magdalena y el canal navegable. Hay suelos disponibles. Es decir, las condiciones están dadas, para ello pondremos a funcionar los distritos de riego y buscaremos nuevas fuentes de abastecimiento de agua en otras zonas. Promoveremos el modelo de cooperatividad, porque con proyectos asociativos nuestros campesinos van a lograr una mayor productividad. Llevaremos asistencia técnica directamente a los cultivos. Y queremos construir un centro de logística para eliminar la intermediación y que los cultivadores logren una mejor rentabilidad.  SEMANA: A pesar de algunos avances en infraestructura educativa, los estudiantes del Atlántico siguen rezagados frente a la media nacional, ¿cómo va a lograr una mejora sustancial en la calidad? E. N.: Tenemos que implementar un nuevo modelo de enseñanza que se ajuste al siglo XXI, enfocado al desarrollo de capacidades como la creatividad, el talento, el pensamiento crítico y la autogestión de problemas. Para eso, vamos a trabajar con los profesores, rectores y padres de familia. Se ha avanzado mucho en infraestructura y ahora lo que requerimos es aprovecharla para trabajar en los temas de calidad. SEMANA: ¿Y en dónde van a estudiar esos jóvenes cuando salgan del colegio si los cupos de la Universidad del Atlántico no alcanzan? E: N.: También queremos dar un salto importante en oportunidades de educación superior, en tres frentes específicos. Uno, crear alianzas con universidades privadas para llevar carreras tecnológicas y técnicas a nuestros municipios, con una matrícula subsidiada. Segundo, abrir nuevos cupos a través de la descentralización de la Universidad del Atlántico y la construcción de nuevos nodos del Sena. Y tres, subsidiar al alto costo de los jóvenes que tienen que estudiar fuera de sus municipios. Le puede interesar: El presidente que quisieran Elsa Noguera y Nicolás Petro SEMANA: ¿Va a ratificar al profesor Jorge Restrepo como encargado en la rectoría de la Universidad del Atlántico o va a agilizar el proceso para escoger un nuevo rector? E. N.: Ese es un proceso que se tarda un poco. Lo más importante es recuperar la confianza y la institucionalidad. Hoy la prioridad debe concentrase en mantener la acreditación en calidad, lo que garantiza que los estudiantes reciban formación de excelencia. Y la universidad tiene todo para consolidarse como el gran centro de investigación del Caribe. SEMANA: ¿Pero, usted cree que puede levantar en este mismo mes la toma y el paro en el que está la universidad? E. N.: Totalmente. Tengo la certeza. Trabajando con estos grupos y generando confianza podemos recuperar el orden y restablecer las clases que deben ser la prioridad. Espero que a partir del 16 de enero, cuando regresen de vacaciones podamos haber recuperado la normalidad en la universidad. SEMANA: El secretario de Educación pasado enfrenta problemas penales por supuestas irregularidades en la contratación del Plan de Alimentación Escolar (PAE). ¿Cómo va a hacer para blindarlo y evitar la corrupción?   E. N.: Los recursos de los niños son sagrados y mucho más los de la alimentación. Pero, no solo debemos orientar los esfuerzos en la transparencia de la contratación del PAE, sino en todos los bienes y servicios que contratemos. En mi gobierno no habrá espacio ni para la ineficiencia ni para el despilfarro, cuidaremos hasta el último centavo de los recursos públicos. SEMANA: ¿Cuál es su plan para afrontar el alto flujo migratorio que ha vivido el departamento, sobre todo en los municipios del sur y del centro? E. N.: El tema de la atención a los venezolanos es de humanidad, esto hay que asumirlo muy alineado y articulado con las políticas del Gobierno nacional, ya que desborda las capacidades desde lo local, pero hay ciertos servicios que hay que garantizar, como la salud y la educación. SEMANA: ¿Qué estrategias tiene para evitar el fortalecimiento de la delincuencia y las bandas delictivas en algunos municipios, sobre todo los del área metropolitana? E: N.: El tema de la seguridad se atenderá desde dos puntos de vista. Lo primero, apoyando a los organismos de seguridad y justicia para que puedan mejorar su capacidad operativa y de respuesta. Segundo, desde el punto de vista más preventivo generando muchas más oportunidades de empleo y emprendimiento a los jóvenes, eso seguramente evitará las probabilidades de que delincan. SEMANA: ¿Es cierto que por petición de la comunidad tuvo que pararse el proyecto para la construcción de la mega cárcel en el municipio de Candelaria? E. N.: Este un proceso que lleva directamente el Ministerio del Interior y que debe surtir un proceso de socialización. Aquí estamos del lado de la gente que ha pedido que se les diga qué se va a hacer y cuáles son los beneficios que tendrían en la etapa de construcción y en el funcionamiento. Ningún proyecto de esta dimensión puede desarrollarse sin una socialización previa. SEMANA: ¿A quién o a qué se refería hace unos días cuando declaró que ya era hora que el país tuviese un presidente costeño? E. N.: (Risas) Lo único que yo les puedo decir es que el de Barranquilla es un modelo que ha trascendido la órbita nacional, porque prioriza a la gente, sabe saltar brechas sociales y, al mismo tiempo, abre oportunidades. Es la ciudad de Colombia que hoy está proyectándose con menor tasa de desempleo, con mayores niveles de inversión y bienestar. Hablo de un presidente que pueda replicar el modelo de Barranquilla en todo el país, porque ha dado resultados.