Unidades del Cuerpo de Bomberos de Bogotá rescataron en las últimas horas a una serpiente que se encontraba enrollada en el motor de un vehículo en la localidad de Puente Aranda.
Según informó el Cuerpo de Bomberos, el caso se registró en la calle 6 con carrera 40, lugar al que acudieron luego de recibir una llamada de la ciudadanía que informó que un vehículo no funcionaba correctamente y que al revisar se sorprendieron al observar que una serpiente estaba enrollada alrededor el motor.
“De inmediato, el personal especializado se dirigió al lugar y, con cuidado, extrajo el reptil del motor del carro sin que sufriera heridas. La serpiente fue entregada a los integrantes del Grupo de Búsqueda y Rescate de Animales en Emergencia”, indicó la entidad.
¿Qué hacer?
A principios de 2021, se registró un caso similar en la capital de país. Tras realizar un viaje al municipio de La Mesa, en el departamento de Cundinamarca, un hombre encontró a una serpiente en el motor de su vehículo.
Tras el viaje, Álvaro Sandoval, consciente de que el carro había sido utilizado para un largo viaje, optó por revisar los líquidos y otras partes del automotor.
Observó las llantas y notó que no había problema. Luego ingresó al auto y activó la palanca con la que se abre el capó. Quería indagar el estado del aceite, el agua y el motor. Luego de abrirlo vino la sorpresa, pero también el gran susto.
En uno de los compartimentos del motor, observó una serpiente de considerable tamaño muy bien acomodada. Su grito alertó a los demás miembros de la familia.
No sabía qué hacer. Pensó en varias posibles soluciones. Finalmente, luego de sobreponerse del impacto, decidió llamar a la línea de emergencia 123 y darles aviso a las autoridades sobre lo ocurrido.
Minutos después, las unidades del Grupo de Protección Ambiental y Ecológica de la Policía Metropolitana de Bogotá arribaron al lugar. Señalaron que se trataba de una boa constrictora, en aparente buen estado de salud.
Con mucho cuidado y utilizando toda la pericia e indumentaria necesaria para atender estos casos, el reptil fue extraído del vehículo y, posteriormente, trasladado a las instalaciones de la Secretaría Distrital de Ambiente para su valoración, recuperación y pronta liberación en su hábitat natural.
La boa constrictor tiene una amplia distribución en el continente americano, desde México hasta Argentina. Habita en desiertos, sabanas, bosques húmedos e incluso cultivos, y puede alcanzar tamaños de hasta cuatro metros de largo.
Este intempestivo suceso no solo le generó un gran sobresalto a don Álvaro y su familia, también les dejó una gran lección: la importancia de realizar una minuciosa revisión de los vehículos antes de salir rumbo a casa cuando se visitan otras regiones del país.
Las autoridades enfatizaron en que cada animal cumple con una función en el ecosistema y deben permanecer en su hábitat; por tanto, no pueden ser extraídos o sometidos a cambios de sus condiciones, ya que eso se configura como maltrato.