En un andén al frente de una vivienda del municipio de Buga, en Valle del Cauca, fue hallada este miercoles una cabeza humana decapitada, que se encontraba dentro de una bolsa negra.
El hecho se registró en el barrio Fuenmayor de la localidad. Según información de testigos, la bolsa con los restos, que fueron enviados a Medicina Legal para su identificación, habría sido arrojada por personas que se movilizaban en una motocicleta.
Las autoridades del municipio anunciaron una recompensa de hasta 25 millones de pesos para quien entregue información que permita esclarecer el crimen.
“Se establece una recompensa por parte de la administración municipal hasta de 10 millones de pesos y por parte de la policía de 15 millones, para un total de hasta 25 millones, para quien brinde información que nos permita dar con la captura de estas personas que cometieron este hecho tan atroz”, manifestó el coronel Carlos Feria, comandante de la Policía de Buga.
El oficial también señaló que se busca establecer con la ayuda de las cámaras de seguridad del sector “en qué se movilizaban estos sujetos que dejaron en este lugar esta bolsa con este órgano humano en su interior”.
Un hecho similar al ocurrido este miércoles se registró el pasado 25 de julio en el municipio de Candelaria, también en Valle del Cauca. Una persona encontró una cabeza decapitada de un hombre al frente de una vivienda en la Carrera 7° con calle 11, barrio Porvenir.
De acuerdo con algunos testigos, la cabeza del hombre fue hallada envuelta en una sábana, algo que llamó la atención de la persona que la terminó encontrando y quien dio aviso a las autoridades que llegaron al sector para realizar el respectivo levantamiento de esa parte superior del cuerpo.
El coronel Jorge Urquijo Sandoval, comandante del departamento de Policía del Valle del Cauca, rechazó este hecho y advirtió que las autoridades ya se encuentran recolectando información necesaria que permita dar con el paradero de los responsables de este atroz hecho en ese municipio.
“Al ser la salida del municipio, al otro lado hay zona rural y ahí también buscamos para dar con el paradero del cuerpo de la víctima”, dijo el oficial Urquijo, quien informó de una recompensa de hasta diez millones de pesos.
Cabe recordar que en junio del presente año se conoció un caso similar de un joven en el municipio de Tuluá, Valle del Cauca, identificado como Santiago Ochoa, cuya cabeza fue hallada en una bolsa.
Una de las versiones que circuló en ese momento en las redes sociales era que Ochoa pertenecía a un grupo activo que bloqueaba una calle de ese municipio en el marco del Paro Nacional y que horas antes de desaparecer fue capturado por miembros del Escuadrón Móvil Antidisturbios (Esmad).
Sin embargo, Martha Ochoa, tía de Santiago, negó que el joven perteneciera a una de las llamadas primeras líneas. “Ni él hacía parte de la primera línea, ni tuvo nada que ver con las marchas o bloqueos, ni fue detenido por la Policía o amenazado nunca. Él simplemente trabajaba en una ferretería, salió a la hora del almuerzo y desapareció”, contó la mujer.
Otra versión que se tejió en las redes sociales fue que supuestamente fue abordado por uniformados del Esmad y luego no se tuvo más conocimiento de su paradero. Frente a este último episodio, la Policía en el Valle del Cauca salió a desmentir esta versión e indicó que en la zona donde ocurrieron los hechos hace un mes no hacía presencia el Esmad.