Si todo sale como está planeado, este lunes 23 de diciembre aterrizaría en Colombia Fabio Ochoa, el excapo del Cartel de Medellín, tras cumplir su condena en Estados Unidos por los delitos de trata de personas, conspiración y distribución de cocaína.

SEMANA conoció que las agencias del Departamento de Estado notificaron a las autoridades en Bogotá sobre la eventual deportación del exnarcotraficante. No hay ningún plan para recibirlo, pues no tiene deudas pendientes con la justicia.

Ochoa saldría de Norteamérica en compañía de funcionarios del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas, adscrito a la Oficina de Investigaciones de Seguridad Nacional (HSI, por sus siglas en inglés).

Él será admitido por los agentes de Migración Colombia y podrá continuar su vida con normalidad. Hay altas probabilidades de que retome su libertad en la capital de Antioquia junto a su familia, aunque allí siguen abiertas las heridas de la guerra.

Fabio Ochoa fue una de las cabezas visibles del Cartel de Medellín. En octubre de 1999 fue capturado en la Operación Milenio, en 2001 fue extraditado hacia Estados Unidos y en 2003 fue condenado a 30 años de prisión.

Uno de los hombres con los que compartió en la criminalidad narró en SEMANA el papel que jugó junto a Pablo Escobar: “Fue narcotraficante toda la vida, todos traqueteaban, eran los líderes del cartel”.

Fabio Ochoa, excapo del cartel de Medellín. | Foto: SEMANA

Los últimos años de prisión los pasó en la cárcel de Jesup, localizada en el estado de Georgia, donde estuvo trabajando en proyectos de energía renovables, según fuentes cercanas al excapo.

Sin embargo, en las últimas semanas fue removido de centro penitenciario y llegó a la Federal Correctional Institution Milan, un espacio de mínima seguridad donde alistó su retorno a Colombia.

De la organización que lideró Pablo Escobar siguen asuntos vigentes. Recientemente, la Fiscalía puso la lupa sobre los movimientos del hermano del excapo, Roberto de Jesús Escobar.

Este hombre volvió a tener los reflectores de la justicia porque estaría disfrutando de bienes que habrían sido adquiridos a través de las ganancias del narcotráfico, ubicados en Antioquia y el Eje Cafetero.

Fabio era el menor del clan que aterrorizó a Colombia junto a sus hermanos, Jorge Luis y Juan David. Ellos se distanciaron de la organización y se sometieron a la justicia bajo los beneficios del presidente César Gaviria.