La exsenadora Aida Merlano, prófuga de la justicia, se convertirá en pocos días en la gran testigo en el proceso que se adelanta por presunta corrupción electoral en contra del senador Arturo Char y, de paso, ventilará el aparato corrupto que supuestamente se implantó en la costa Caribe para hacer fraude en las elecciones. El escándalo se conoció en su momento como ‘La Casa Blanca’.

De tal calibre es el aporte que podría dar Merlano, que el abogado Miguel Ángel del Río señaló que es necesario proteger a la testigo, pues en su criterio, la “han querido silenciar”. Del Río advirtió que la diligencia la aplazaron para el próximo lunes 31 de enero, y ahí la exsenadora tendrá la posibilidad de cumplir lo prometido, su declaración, el ventilador en contra de quienes, junto a ella, construyeron una empresa criminal dedicada a la compra de votos en el norte de Colombia.

SEMANA conversó con el abogado Del Río, quien además puso un mensaje en sus redes sociales en el que advierte que no solamente los Char serían mencionados, sino además otros apellidos como los Name, casa política encabezada por el senador José David Name, y el célebre excongresista Eduardo Pulgar, condenado hace poco por la justicia.

“Esas verdades ocultas de Aida Merlano sobre los Char, los Name, Pulgar y tantas familias de la costa cuya única “virtud” ha sido el fraude electoral. Verdades que pondrán a temblar el departamento. ¡Las mafias de mi tierra!”, escribió el abogado.

En diálogo con SEMANA, el abogado explica que se trata de verdades ocultas a las que “ha tenido acceso históricamente Merlano. Hoy más que nunca se hace necesario que se conozcan. A ella la han convertido en la supuesta criminal que en su momento tenía en su poder armas y fue acusada incluso de porte ilegal, cuando sabemos que es una construcción ficticia. Precisamente, esa mafia que le dio la espalda, cuando era su gran aliada, pues evidentemente ella va a establecer cuáles son las intervenciones de ellos en la construcción de un gran fraude electoral en la costa norte”.

Sobre los Name, Del Río señala que indudablemente son parte de las familias tradicionales de esa región del país: “Ellos han participado en esa construcción fraudulenta que tanto daño le ha hecho a la región. Es que son dos o tres familias, en la costa norte, que siempre han construido compra de votos como legitimidad desde el punto de vista de la representación política”.

La exsenadora fue capturada por orden de la Corte Suprema, luego de las denuncias y la investigación de la Fiscalía que destapó la llamada Casa Blanca, una sede de campaña que se convirtió en un centro de operaciones para la corrupción electoral. Luego de su captura y judicialización, aprovechó un descuido del personal de guardia en el Inpec para protagonizar una fuga de película.

La propia exsenadora, desde su escondite en Venezuela, le ofreció a la Corte Suprema una declaración. En ese momento dijo que su único objetivo es colaborar con la justicia y así avanzar con las indagaciones que tiene a dos congresistas en diligencias judiciales.