El pasado 21 de septiembre la noticia de que un carro cayó al abismo del Salto del Tequendama ocupó los titulares de la prensa nacional. Entre las principales hipótesis que manejaron las autoridades se encontraban que podría ser un suicidio. Asimismo, que eran dos personas las que iban en el carro.

Sin embargo, luego de una exhaustiva labor de búsqueda, este viernes 23 de septiembre, los Bomberos de San Antonio de Tequendama, Soacha, Cundinamarca, Defensa Civil y Cruz Roja, por fin encontraron el cuerpo del conductor del vehículo que cayó al vacío, identificado como Gerardo Lino Segura Franco, un hombre de 47 años de edad, que este 24 de septiembre cumpliría 48.

Aunque las muertes en este punto de Cundinamarca genera toda clase de especulaciones, casi siempre asociadas a los suicidios, los testigos que se encontraban en el lugar afirman que el hombre conducía a una exagerada velocidad por la carretera que comunica la capital del país con San Antonio del Tequendama, cuando en una curva perdió el control del automóvil y lamentablemente cayó al abismo.

Las primeras hipótesis indicaron que el carro salió de Soacha con destino a San Antonio de Tequendama y, según la información de un grupo de “paletilleros” que trabajan dando vía en un sitio muy cerca del abismo, el automóvil en el que viajaba Gerardo Segura Franco no iba en buenas condiciones, por lo que una falla mecánica sería la culpable del fatal accidente.

“Yo vi cuando el carro subió porque llevaba una llanta averiada. El carro cruzó y yo dije: ‘Ese carro va vuelto nada, seguro se va a despinchar por allá’. Pero a los diez minutos volvió y bajó el señor y me mandó el carro por encima (...), cuando cogió la curva cogió vuelo y se llevó la cerca y cayó al vacío. El accidente fue sobre las 12:25, él iba solo, nosotros nunca vimos otra persona porque le alumbramos el carro y solo estaba él”, afirmó Jhon Bairon Forero, uno de los pocos testigos.

Las primeras informaciones sugirieron que el hombre viajaba en compañía de otra persona, que podría ser una de las empleadas de su restaurante. Sin embargo, en la escena del terrible accidente no hubo rastro alguno de la muerte de una segunda víctima. Por lo que esta versión fue desestimada en las últimas horas por las autoridades.

Además de no encontrar rastros de un acompañando en el vehículo, tampoco se encontró ninguna marca que diera indicio de que hubiera alguien desaparecido. Ya que el panorámico del vehículo no se fragmento por completo, como para que se pudiera pensar que otra víctima habría salido expulsada del carro producto del fuerte impacto. Por todo esto, esta hipótesis se descartó.

En las últimas horas las autoridades hicieron el levantamiento y la entrega del cuerpo de la víctima del accidente a sus familiares. Y aunque se han descartado varias hipótesis, los investigadores continúan indagando para entender qué fue lo que sucedió en el momento del accidente y establecer claramente cuáles eran las condiciones mecánicas del carro antes de que cayera al abismo.