En la mina Fama Dos está atrapado José Javier Hernández Gélvez, de 30 años, quien trabajaba allí sacando carbón. El derrumbe dentro de la mina ocurrió el pasado jueves en Cácota, municipio de Norte de Santander. Según relatan los mineros, en el momento en que sucedió la tragedia, Hernández se encontraba a unos 15 metros de donde estaban los demás, desde ese instante nadie más lo volvió a ver. Las actividades de rescate se realizaron por 40 horas seguidas sin éxito, según el alcalde Carlos Flórez. A esta mina ubicada en la vereda Chinavega, que se encuentra en la vía que conduce de Cácota a Bucaramanga, llegó la Cruz Roja, la Policía, la Unidad Nacional de Gestión del Riesgo, la Personería y funcionarios de la Agencia Nacional de Minas.
Entre los expertos de la agencia y mineros experimentados que intentaron rescatar a Hernández, sumaban 20 personas. Sin embargo, el domingo pasado decidieron sellar la mina, cesaron las actividades de rescate y Hernández -oriundo de Pamplona- quedó atrapado.
“Los de la Agencia Nacional de Minas nos dijeron que no podían continuar, porque estaban poniendo en riesgo la vida de los trabajadores, de los rescatistas y la propia. Yo me acerqué y hablé con uno de los trabajadores, le dije: ‘Dígame la verdad, ¿cómo ve el tema con la experiencia que tiene: se puede hacer algo o ya es imposible?’, él me manifestó, casi llorando, que era imposible seguir trabajando, que ya la mina no les permitía”, dijo a SEMANA el alcalde. La decisión de sellar la mina ha sido cuestionada por la misma familia de Hernández, debido a que guardaban la esperanza de que estuviera con vida y de no ser así, quieren que les entreguen el cuerpo.
“La mina se vino abajo y él quedó atrapado, al parecer, estaba en un túnel que podría medir 200 metros bajo tierra. Yo entiendo que las esperanzas de vida son pocas, pero es inhumano que no rescaten el cuerpo”, sostuvo la expareja de Hernández a La Opinión de Cúcuta. El alcalde, por su parte, asegura que se decidió cerrar porque en la madrugada del domingo la mina dio un remezón y "los sacó prácticamente” y había un alto riesgo de que otras personas también quedaran atrapadas. “Hay muchos rumores de que es responsabilidad de la administración municipal, que de pronto no se llevó a la gente idónea. Pero quiero decirle que la verdad ahí estuvieron unas de las personas más capacitadas a nivel nacional para estos eventos, ellos mismos decían: ‘Esto es algo que se nos sale de las manos’”, explicó el mandatario. El reporte oficial de lo que ocurrió y de las razones por las que decidieron detener las actividades de rescate y cerrar la mina será expedido por la Agencia Nacional de Minas. Mientras tanto, el drama de la familia de Hernández, padre de una pequeña de 7 años, continúa.