Un informe de inteligencia militar reveló los primeros detalles del ataque que se realizó en contra del presidente Iván Duque el pasado 25 de junio en Norte de Santander, cuando se desplazaba en compañía de los ministros de Defensa y el Interior.
La información, revelada por Noticias Caracol, señala la identidad de algunos de los presuntos autores materiales de este ataque, los grupos armados a los que pertenecerían y la forma en que habrían planeado el ataque, así como el escape del lugar desde donde se generaron los disparos.
Carlos Eduardo García Téllez, conocido como alias ‘Andrey’ y quien figura como segundo cabecilla del frente 33 de las disidencias de las Farc en este departamento, habría sido, según la inteligencia militar, el cerebro de este atentado que por fortuna no tuvo graves consecuencias. Sin embargo, no fueron directamente las disidencias, sino que hubo una alianza con el Ejército de Liberación Nacional (ELN) para realizar el ataque.
El texto indica que alias ‘Jhon Mechas’ y Robinson Navarro Flórez, alias ‘Alfred’, del ELN, fueron quienes dispararon hacia la aeronave, cuando esta estaba próxima a aterrizar en la ciudad de Cúcuta.
Los hechos se habrían ejecutado desde el barrio La Conquista, de la capital de Norte de Santander, desde donde los hombres mencionados junto con otras personas ubicaron las armas que habrían sido suministradas por el ELN y se habrían desplazado en vehículos de las disidencias.
Fue precisamente en este punto en donde se encontraron los dos fusiles (un AK-47 y un 7-62 con marcas de las Fuerzas Armadas de Venezuela), a pocas horas del ataque, que están ya en manos de las autoridades nacionales y son parte de las investigaciones que se adelantan para establecer los responsables del hecho.
“Los hechos ocurrieron a 1,2 kilómetros de la cabecera de la pista del aeropuerto de Cúcuta”, precisó la Policía Nacional, tras revelar que “esos fusiles son un AK-47 con número de registro que ya está siendo buscado por los peritos de la Policía Nacional y de la Fiscalía, y un fusil calibre 7-62 tipo FAL con marcas de las Fuerzas Armadas de Venezuela”.
También se encontraron 20 vainillas percutidas, 14 de las cuales pertenecen al fusil FAL y seis al fusil AK-47, según los peritos preliminares de la Policía y la Fiscalía General de la Nación.
La información de inteligencia también destacó que la sección del ELN que opera en esta zona planeó su escape hacia Venezuela. Además, se precisó que dejaron los fusiles en el mismo punto desde donde se hizo el ataque con el fin de no ser retenidos o identificados en los controles militares que se generaron tras el ataque en todo el departamento.
Las autoridades colombianas recordaron que hay una recompensa, de hasta $3.000 millones por la información efectiva que conduzca a dar con el paradero de los presuntos responsables, con lo cual invitó a que los ciudadanos se comuniquen a los siguientes números.
Hace algunos días el ministro de Defensa, Diego Molano, dijo -en relación con los presuntos responsables del atentado contra el presidente Duque- que se tiene información de una posible alianza “narcotraficante”, entre las disidencias de las Farc y el frente urbano del ELN, que “delinquen en Norte de Santander y tienen presencia en Venezuela”, manifestó el ministro.
Para adelantar la investigación y dar con el paraderos de los presuntos responsables del atentado, el Gobierno no escatimará esfuerzos, según dijeron las autoridades. De hecho, se armó todo un equipo, integrado por 84 investigadores, liderados por la Dijín y la participación del departamento de inteligencia de Norte de Santander.
La revisión pasa por poner la lupa en 200 horas de grabación de cámaras que estaban en los alrededores del aeropuerto de Cúcuta, pero también se ha puesto el visor sobre otras grabaciones en cámaras de la capital nortesantandereana.
De igual manera, ya se han adelantado entrevistas judiciales y cotejamiento de informaciones que se siguen hallando, pues el área en la que se encontraron los fusiles y demás artefactos, aún sigue siendo tratada, según expresó el director de la Policía.