La representante en Colombia de la Alta Comisionada de Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Juliette de Rivero, resaltó este martes la labor de los defensores de DD. HH. y aseguró que el país deberá avanzar hacia la “implementación plena del Acuerdo de Paz”.

La declaración fue hecha en el marco de la presentación virtual del informe anual de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) sobre la situación de los derechos humanos en Colombia durante el año 2020.

“He sido testigo del talento humano, el alto compromiso y resiliencia de los defensores y defensoras de derechos humanos y sus comunidades”, afirmó Juliette de Rivero durante la presentación virtual.

“Colombia tiene los recursos, la capacidad humana y la institucionalidad necesaria para enfrentar los desafíos de derechos humanos y para lograr una implementación plena del Acuerdo de Paz”, agregó Rivero, quien comenzó su labor como representante en Colombia de la Alta Comisionada a mediados del año pasado.

El informe resalta que el año pasado representó nuevos desafíos para las instituciones y la ciudadanía por cuenta de la pandemia del coronavirus, pues la coyuntura profundizó problemáticas sociales que afectaron principalmente a personas de bajos ingresos, mujeres, habitantes rurales, pueblos indígenas y afrodescendientes.

La experta señaló que se intensificaron los flagelos de violencia en algunos territorios, comunidades, municipios y departamentos del país, lo que calificó como una “grave situación de violencia”, sobre todo porque en muchos de esos territorios aumentó el control territorial y social por parte de grupos armados no estatales.

También afirmó que la defensa de los derechos humanos en Colombia sigue siendo “una actividad de alto riesgo” y que los altos índices de violencia que viven algunas regiones generan contextos de vulnerabilidad aguda para líderes y lideresas sociales.

Algunas de esas regiones en las que mayor riesgo corren los líderes son: Antioquia, Cauca, Chocó, Norte de Santander, Nariño, Putumayo y Valle del Cauca.

Una enciclopedia de datos para comprender el conflicto armado | Foto: SEMANA

El documento, en el que se hizo seguimiento, análisis y diagnóstico a los derechos humanos en el país, será también presentado por la Alta Comisionada Michelle Bachelet ante el Consejo de Derechos Humanos de la ONU en Ginebra, Suiza, el próximo 25 de febrero.

El segundo país más desigual

Colombia se encuentra entre los dos países con mayores niveles de desigualdad de América Latina, según los más recientes reportes de la Comisión Económica para América Latina (Cepal).

“Es importante que en 2021 el Gobierno refuerce la implementación de sus obligaciones internacionales en materia de derechos económicos, sociales y culturales, y las disposiciones del Acuerdo de Paz que buscan resolver las causas profundas del conflicto”, agrega el informe del organismo internacional.

Buenaventura (Colombia). Foto: Luis Ángel Murcia/SEMANA

Sobre el aumento en el número de denuncias por violencia intrafamiliar, el documento reveló que “durante la pandemia se realizaron 21.602 llamadas por violencia intrafamiliar a la línea 155 de orientación, un aumento del 103 % respecto a 2019″.

Uno de los casos que mayor incremento presentó fue el de la violencia contra personas de la comunidad LGBTI, con 388 casos reportados entre enero y agosto del año pasado que fueron atendidos por la Defensoría del Pueblo.

Se dispararon las masacres

En 2020 se documentaron 76 masacres que implicaron la muerte de 292 personas, incluyendo 23 mujeres, 6 niñas, 18 niños, 7 indígenas y 10 afrodescendientes. “Desde 2018, el número de masacres ha incrementado constantemente, siendo 2020 el año con la cifra más alta registrada desde 2014″, agrega el documento.

Los lugares más afectados por ese incremento de la violencia de grupos armados y criminales se encuentran principalmente en los departamentos de Antioquia, Cauca, Chocó, Putumayo, Nariño, Norte de Santander y Valle del Cauca, en particular zonas en las que habitan pueblos afrodescendientes, indígenas y campesinos.

“La violencia afecta los proyectos de vida de estas poblaciones y la protección de sus derechos culturales, espirituales y territoriales, entre otros”, complementa el informe.

Por otra parte, el organismo internacional hizo un llamado a todos los actores de la sociedad, incluidos los sectores empresariales, militares y políticos, para que aporten información relevante que permita a la Comisión de la Verdad llevar a cabo el esclarecimiento de los hechos de violencia relacionados con el conflicto armado interno.

“Creemos que 2021 es un año de grandes oportunidades para Colombia. La principal de ellas es la capacidad que tenga la sociedad y el Estado de recibir, escuchar y conocer la verdad”, concluye el informe.