Pese a que todo estaba listo para que este jueves se definiera la solicitud de nulidad en el proceso que se adelanta contra John Nelson Poulos por los hechos que rodearon el crimen de la DJ Valentina Trespalacios, la audiencia se tuvo que reprogramar por petición del traductor designado por la Judicatura.
El intérprete designado pidió tiempo para entregar la traducción formal de todas las audiencias, que se extendieron por seis días. Esto con el fin que la jueza 10 de conocimiento de Bogotá tome una decisión de fondo.
En la sala de audiencias del complejo judicial de Paloquemao estaban presentes tanto la madre y el hermano de Valentina, quienes fueron reconocidos como víctimas de la joven cuyo cuerpo sin vida de la joven de 21 años fue hallado en cercanías a un basurero en la mañana del pasado 22 de enero, en la localidad de Fontibón en el occidente de Bogotá con evidentes signos de tortura.
La diligencia judicial se reprogramó para el próximo martes 9 de mayo. La defensa de Poulos insiste en que sus derechos procesales en la audiencia de imputación de cargos puesto que la primera traductora no tenía la formación técnica lo que la llevó a omitir puntos fundamentales de lo que decía la Fiscalía General frente a los hechos que rodearon el crimen de la joven de 21 años.
“Falló el sentido material, la idoneidad de la traductora oficial, no existe el respeto al derecho de defensa”, aseveró el abogado en la audiencia celebrada el pasado 19 de abril y en la que se iba a presentar el escrito de acusación por los delitos de feminicidio agravado y ocultamiento de elementos materiales probatorios.
Para el jurista, hay por lo menos 300 frases de la traducción hecha durante la audiencia de imputación de cargos que no corresponden a la realidad de los hechos que estaba narrando la Fiscalía. “Era el Estado el que debía proporcionarle una traductora idónea”.
Para sustentar su dicho, puso de presente el informe realizado por una traductora certificada que advirtió de las falencias en la traducción simultánea durante las audiencias de imputación de cargos y solicitud de medida de aseguramiento.
En este sentido indicó que hubo “falta de seguridad, frases incompletas, pronunciaba una palabra igual en diferentes contextos y cambiaba la pronunciación; las oraciones tienen un orden gramatical en inglés y faltó ordenarlas; el señor John Nelson Poulos decía que entendía pero escuchando la traductora oficial hay frases bastante confusas; faltó dejar terminar al fiscal la frase para que ella realizara la traducción correctamente, faltó una buena pronunciación en el idioma inglés”.
Esto se suma a que la traductora demostró que no tenía conocimiento de términos judiciales claros para que el procesado entendiera claramente los hechos por los cuales estaba siendo vinculado a un proceso de tipo penal en Colombia.
“No quedó claridad frente a algunos aspectos de los hechos jurídicamente relevantes frente al delito de feminicidio las circunstancias de agravación, se omitieron o fueron ambiguos algunas traducciones sobre hechos indicadores del tipo penal”, precisó el jurista.
En su intervención aseguró que no existió una idoneidad de la traductora, quien solamente debía realizar bien su trabajo “y no lo hizo”. Para el abogado de Poulos, existen muchos fallos de la Corte Suprema de Justicia y la Corte Constitucional que advierten la necesidad que la traductora sea clara y precisa cuando se trata de un extranjero.
“El delito de feminicidio habría de explicárselo de mejor forma por parte de la traductora por el hecho que de forma cultural, en el estado de Wisconsin de donde es oriundo John Nelson Poulos, no existe el feminicidio”, cuestionó el abogado al señalar que la explicación no fue clara ni precisa cuando se le hacía mención a la gravedad del cargo.
La Fiscalía General va a acusar a Poulos por los delitos de feminicidio agravado y ocultamiento de elementos materiales probatorios, también agravado. El ente investigador cuenta con un centenar de pruebas documentales y testimoniales para probar su teoría del caso, esto es, que el ciudadano estadounidense le causó la muerte a la joven, luego botó su cuerpo y quiso evadir a la justicia colombiana saliendo del país.