La explosiva declaración de Íngrid Betancourt en contra de Alejandro Gaviria, compañero en la coalición Centro Esperanza durante el cara a cara adelantado este martes por SEMANA y El Tiempo, puso al descubierto una vez más las fuertes fracciones al interior de la centroizquierda.
La exsecuestrada denunció que el exministro de Salud está recibiendo maquinarias políticas en su campaña, como Cambio Radical. Específicamente se refería al senador Germán Varón Cotrino.
Esta no es la primera vez que dicha convergencia enfrenta una crisis, pero esta es quizá la más fuerte porque fue en público, ante millones de colombianos que seguían paso a paso el cara a cara.
Betancourt –como lo dijo durante la transmisión– no está de acuerdo con las alianzas a las que está acudiendo Alejandro Gaviria. Además del arribo a su campaña de Germán Varón Cotrino, la colombo-francesa tiene información que también arribarán otras figuras de dicho partido político que, a su juicio, representan a las maquinarias.
La tensión entre Betancourt y Gaviria llegó a tal nivel que la Coalición Equipo por Colombia citó con urgencia una reunión privada en la casa del precandidato Juan Fernando Cristo, en el norte de Bogotá. Allí, a puerta cerrada, esperan dirimir lo ocurrido.
Al encuentro, que empezó a las 3:00 de la tarde de este martes, no asistió el exrector de Uniandes, Alejandro Gaviria, quien se declaró indignado tras los señalamientos de Betancourt. Al contrario, lo hacen los demás precandidatos excepto Jorge Enrique Robledo, porque tiene coronavirus.
El escenario para Alejandro Gaviria es complejo. A juzgar por lo ocurrido en el debate, él no contó con el respaldo de sus compañeros, entre ellos, Sergio Fajardo y Juan Manuel Galán. El antioqueño, al contrario, respaldó a la exsecuestrada. Al fin y al cabo, él –desde que se empezó a discutir el posible ingreso de Gaviria– advirtió que podía estar acompañado del clientelismo de partidos políticos tradicionales, e incluso César Gaviria, presidente del Partido Liberal.
Jorge Enrique Robledo, por su parte, ya fijó su postura en contra del académico”. Acertada la crítica de @IBetancourtCol a @agaviriau, por aceptar el respaldo de un senador de Cambio Radical a su precandidatura en la #CoaliciónCentroEsperanza. Tiene que haber límites. Y es inaceptable la forma que Gaviria usó frente al justo cuestionamiento de Íngrid”, manifestó.
En realidad, Gaviria está contra las cuerdas. Candidatos como Betancourt, Fajardo, Robledo y Juan Manuel Galán rechazan tajantemente el respaldo de las maquinarias en la Centro Esperanza, mientras Juan Fernando Cristo promete mediar, un papel que también realizará Carlos Andrés Amaya, cercano al exrector Gaviria.
En diálogo con SEMANA, Íngrid Betancourt dijo que después de la reunión aspira a que todo salga bien. “Creo que es necesario hablar de estos temas francamente, que no nos metan las cosas como por…”, enfatizó.
A Betancourt la sorprendió la posición de Alejandro Gaviria. No esperaba una respuesta con un nivel de soberbia que, según ella, desconocía. “Lo suyo es hipocresía y oportunismo”, le dijo el académico en el cara a cara.
Íngrid es pacífica y le gusta tender puentes. Recordemos que ella junto con Humberto de la Calle se convirtieron en las figuras clave que permitieron el ingreso de Alejandro Gaviria a la Centro Esperanza y de paso calmaron los ánimos y las divisiones que existían entre el exministro de Salud y Sergio Fajardo.
“Hay que ver cómo se soluciona esto de la mejor manera, yo no quisiera que se diera la salida de nadie, pero sí me parece que se tienen que respetar los acuerdos que establecimos en el cónclave, es decir, aquí hay un pacto que se tiene que respetar. Es importante hablar esto, lo que nos diferencia a nosotros de las otras coaliciones es que nos hemos dado la pela para no permitir el ingreso de maquinaria. Y si entra Cambio Radical, que es una maquinaria, ¿qué podríamos decir?”, afirmó a SEMANA.
El tire y afloje que existe actualmente es que mientras Íngrid Betancourt se sostiene en impedir el ingreso de maquinarias a su coalición, Alejandro Gaviria, en un tono desafiante, anunció públicamente que seguirá sumando apoyos.
¿Quién ganará la puja? ¿Cederá Íngrid Betancourt o Alejandro Gaviria? Las respuestas son inciertas. Por lo pronto, y tras la no asistencia del exrector a la reunión de la tarde de hoy lunes, el escenario no pinta nada bien en los próximos días para la centroizquierda.
Al menos, la propia Íngrid Betancourt ya hizo pública su posición de hacerse a un lado de la coalición si no se cumplen las reglas de juego, una decisión que nadie está dispuesto a aceptar al interior de la coalición porque significaría un nuevo golpe para dicho grupo político.