Un nuevo caso de inseguridad se presentó en las últimas horas en Bogotá, en donde un contratista de la Unidad Nacional de Protección (UNP) fue víctima de la delincuencia. El episodio ocurrió en horas de la madrugada en la localidad de Puente Aranda, en donde un contratista de la UNP fue abordado por delincuentes.
Según la versión que entregó la Policía, la víctima desenfundó su arma de fuego, la cual le fue arrebatada por los criminales, quienes se aprovecharon de la situación y le dispararon en tres oportunidades.
Gravemente herido fue trasladado al hospital Santa Clara, en donde los médicos no le pudieron salvar la vida, debido a la gravedad de las lesiones.
El coronel Jairo Baquero, comandante operativo de la Policía de Bogotá, indicó que se inició la respectiva investigación para determinar quiénes son los responsables de este homicidio.
Este nuevo homicidio en un caso de inseguridad se conoce en medio del plan de choque que anunciaron las autoridades nacionales y distritales para frenar los casos de violencia en la capital del país.
Para este proceso se destinó un componente de 1.500 policías que están realizando trabajos de prevención, investigación y operativos contra la delincuencia organizada en la ciudad.
Según el comandante de la Policía de Bogotá, el general Eliécer Camacho, ya han sido capturadas cerca de 200 personas que formaban parte al parecer de bandas de crimen organizado urbano.
Sobre la reciente temporada de violencia en Bogotá, el ministro de Defensa, Diego Molano, dijo: “Ante la grave situación de inseguridad y homicidio que se presentó en Bogotá en los últimos meses y especialmente la última semana, y acudiendo al llamado urgente que nos hace la alcaldesa de intervenir y apoyar a la ciudad de Bogotá, el Ministerio de Defensa y la Policía Nacional han tomado la siguiente decisión de apoyo directo de intervención en Bogotá, por lo cual se activa a partir de este fin de semana una fuerza especial de intervención judicial contra el homicidio y el hurto”.
Agregó el funcionario que “ni colombianos ni extranjeros pueden cometer delitos y el gobierno del presidente Duque tiene toda la solidaridad con los venezolanos que han llegado a Colombia, pero seremos claros con cualquier ciudadano venezolano que comete un delito contra un colombiano. Eso no se permitirá. Aquí se les están brindando oportunidades”.
Es de recordar que uno de los casos que más estremeció a los bogotanos recientemente fue el del patrullero Humberto Sabogal, quien fue asesinado a disparos presuntamente por un delincuente de ciudadanía venezolana.
El uniformado y su compañero fueron a atender un llamado sospechoso en la calle 11 Sur con Caracas, cuando varios hombres se enfrentaron con los uniformados, pero en particular uno de ellos sacó un arma de fuego y le disparó a Sabogal.
El compañero de Sabogal resultó herido en una de sus piernas, mientras que el presunto responsable fue capturado a pocas cuadras del lugar donde se presentó el enfrentamiento entre la ley y el hampa.
Este caso fue el detonante para que las autoridades nacionales diseñaran un plan especial para Bogotá, que constituyó en el envío por etapas de 1.500 uniformados, que se encuentran bajo la coordinación de cinco generales, que tienen asignadas varias localidades afectadas por la delincuencia.
Hay que señalar que recientemente se generó una nueva controversia entre Bogotá y el Gobierno nacional por la creación de un comando conjunto para atacar los delitos cometidos por población migrante. Sobre el particular, el Gobierno nacional desautorizó a la Alcaldía de Bogotá y dijo que los delitos no tienen nacionalidad y que la inseguridad se debe atacar en todos los frentes, y que tanto colombianos como extranjeros que se vean inmersos en actos delictivos deben ser sancionados.