La historia que destapó la Fiscalía con una investigación contra las bandas dedicadas al hurto de residencias en Bogotá, resultó insólita. Los protagonistas eran los vigilantes o celadores de los conjuntos residenciales que se convirtieron en el escenario de decenas de atracos a apartamentos que se supone debían estar bajo su cuidado.

El ente acusador reveló los detalles de la investigación que derivó en la captura de cuatro integrantes de ‘Los Seguros’, la banda a quien la Fiscalía en Bogotá, les atribuye por lo menos 15 hechos de hurto, en apartamentos y casas que, estaban bajo vigilancia de los ahora detenidos.

La Fiscalía logró la captura de los vigilantes que coordinaban los atracos en apartamentos y bodegas en la capital del país. | Foto: Fiscalía

Los vigilantes cortaban el servicio eléctrico en los conjuntos residenciales e inhabilitaban cámaras de seguridad para facilitar los atracos. Sin energía eléctrica y la vigilancia en video, le abrían la puerta al resto de la banda para completar el hurto en los apartamentos. Para garantizar los atracos les pagaban a sus compañeros, otros vigilantes, para evitar que reportaran lo que ocurría en sus turnos de vigilancia.

“Luego de asociar varias denuncias de hurtos a viviendas en Bogotá y algunos municipios de Cundinamarca, y recopilar abundante material de prueba, la Fiscalía General de la Nación identificó a una red delincuencial conocida como ‘Los Seguros’, la cual estaría conformada en su mayoría por vigilantes”, dijo Leonor Merchán, directora seccional de fiscalías en Bogotá.

Los hurtos, sin ser exagerados en cantidad, lo eran en valor. La cuantía superó los 1.700 millones de pesos. Atracos pequeños, pero cuantiosos: dinero en efectivo, joyas, relojes y artículos de valor que sacaban en maletas para evitar llamar la atención o que resultara descarado, como un trasteo.

La Fiscalía logró la captura de los vigilantes que coordinaban los atracos en apartamentos y bodegas en la capital del país. | Foto: Fiscalía

“Estas personas se desempeñaron como celadores en distintos conjuntos residenciales. Esto les habría permitido alertar a sus cómplices sobre los apartamentos o casas que quedaban desocupados porque los propietarios se ausentaban durante los fines de semana o se iban de vacaciones”, dijo la funcionaria.

El Cuerpo Técnico de Investigaciones CTI con el apoyo del Ejército Nacional, adelantó varios operativos de allanamientos para lograr la captura de los vigilantes que, solo horas antes, estaban en su puesto de trabajo, en la supuesta seguridad de los apartamentos que posteriormente serían objeto de hurto.

“En los procedimientos se incautaron de armas de fuego, proyectiles de diferentes calibres, 5 radios de comunicación, dólares y euros en efectivo, 34 millones de pesos, 4 chaquetas con logos alusivos a empresas de seguridad, 16 relojes de diferentes marcas, chequeras, joyas, celulares, tarjetas bancarias, llaves magnéticas, electrodomésticos y elementos de cerrajerías”, advirtió el ente acusador.

La Fiscalía logró la captura de los vigilantes que coordinaban los atracos en apartamentos y bodegas en la capital del país. | Foto: Fiscalía

En varias oportunidades los vigilantes drogaron a sus compañeros de trabajo, que no eran parte de la organización criminal, para dormirlos y continuar con los atracos sin ningún problema. Les suministraban somníferos en los tintos que compartían en la noche y durante los turnos de seguridad. Los dejaban dormidos mientras el resto de la banda terminaba los hurtos.

“La Fiscalía ha documentado hasta el momento 15 eventos ocurridos durante el último año, en los que fueron hurtados artículos avaluados en más de 1.700 millones de pesos. Por estos hechos, un fiscal de la Seccional Bogotá imputó a ‘Los Seguros’ los delitos de concierto para delinquir, y hurto calificado y agravado”, dijo Merchán.

Tras la imputación de cargos, la Fiscalía aseguró ante un juez, que los vigilantes, lejos de garantizar la seguridad de los ciudadanos, representan un peligro para la sociedad y es necesario mantenerlos privados de la libertad, que estén en una cárcel mientras avanza su proceso. Ninguno de los vigilantes aceptó su responsabilidad en los atracos.