Este fin de semana se conoció que entre las entidades del Estado en las que hay revuelo por los despidos masivos está el Instituto Caro y Cuervo, adscrito al Ministerio de Cultura. La salida de alrededor del 80 % de los colaboradores se empezó a dar en la última semana, aunque como lo manifestó SEMANA, está relacionada con el concurso de méritos que organizó el Gobierno nacional para la ocupación de cargos públicos.

La salida de los trabajadores que manifiestan inconformidad por la manera en la que se realizó el proceso y algunas posibles irregularidades, coincide justo con la llegada del nuevo director, sin que esté relacionada una circunstancia con la otra. Pero sin duda sí es un reto el que tiene que afrontar el profesor Medófilo Medina, cabeza de la entidad, debido a que solo el pasado viernes se posesionó y recibe al Instituto Caro y Cuervo con las denuncias de los trabajadores salientes, que tenían años de trayectoria. Y recibirá a la nueva planta de colaboradores.

Hernando Romero, funcionario del instituto desde hace 20 años, denunció que entre los compañeros a los que les cancelaron el contrato hay personas que estaban a menos de dos años de pensionarse o que presentan problemas de salud, quedando ahora a la deriva.

Indica que hubo presuntas irregularidades dentro del proceso. “Nadie nos avisó, nos enteramos por casualidad, un compañero entró a la plataforma y nos avisó, y después no nos dieron capacitaciones para presentar el examen como lo prometieron desde las áreas administrativas”, dijo a SEMANA.

La salida de los trabajadores que manifiestan inconformidad por la manera en la que se realizó el proceso y algunas posibles irregularidades, coincide justo con la llegada del nuevo director.

Este medio buscó respuestas del instituto y ellos aseguraron en un comunicado que: “Con respecto a la pertinencia de los ejes temáticos en las pruebas del concurso, informamos que, si bien el Instituto precisó y objetó algunos de los criterios de los ejes temáticos, la CNSC no los tuvo en cuenta a la hora de fijarlos. Una de las insistencias del Instituto fue proteger los empleos de los funcionarios de la Imprenta Patriótica para contribuir a la salvaguardia de los saberes y oficios patrimoniales de Colombia”.

De igual manera, se pronunciaron sobre otros de los puntos cuestionados por los denunciantes, indicando que para ellos es incomprensible la relación que se establece entre el recién posesionado director del Instituto Caro y Cuervo y la situación de retiro de algunos funcionarios provisionales por cuenta del concurso de la Comisión Nacional del Servicio Civil (CNSC).

Aclaran que, en cumplimiento de la ley, el Instituto Caro y Cuervo expidió los actos administrativos de nombramiento el 30 de diciembre de 2022. El Plan Nacional de Desarrollo (PND) 2018-2022 le exigió al Estado reducir la provisionalidad del empleo público.

Este fin de semana se conoció que entre las entidades del Estado en las que hay revuelo por los despidos masivos está el Instituto Caro y Cuervo, adscrito al Ministerio de Cultura.

En el comunicado explican que al momento de ser aprobado el PND, el Instituto Caro y Cuervo tenía 99 cargos: ocho de libre nombramiento y remoción y 91 de carrera administrativa, de los cuales 86 cargos fueron sometidos a concurso, debido a que los funcionarios que los ocupan están nombrados en provisionalidad.

Dejan claro que la CNSC tiene la obligación constitucional de adelantar los concursos para proveer los cargos del Estado a través de un proceso de selección abierto y público, que para el caso del Instituto Caro y Cuervo se denominó Proceso de selección 1505 de 2021 -Nación 3.

“La CNSC, mediante Acuerdo 0346 del 28 de noviembre de 2020, abrió el concurso para proveer, de forma definitiva, 81 de los 86 cargos indicados anteriormente”, señalaron antes de manifestar que para dicho concurso, la CNSC contrató a la Universidad Libre para llevar a cabo todas las actividades relacionadas con el mismo, lo cual, entre otros, incorpora la estructuración de la prueba de conocimientos.

El concurso inició con la venta de derechos de participación el 5 de mayo de 2021 y la aplicación de las pruebas se hizo el 15 de mayo de 2022. La lista de elegibles en firme fue publicada y comunicada el 23 de diciembre de 2022 por la CNSC.

Como toda entidad pública, el Instituto Caro y Cuervo contempla un plan de capacitación anual, con más de treinta sesiones convocadas, para cumplir sus fines institucionales, y este se mantuvo durante el tiempo de desarrollo del concurso.

“Es importante resaltar que el proceso de este concurso lleva más de dos años desde cuando fue convocado. Asimismo, fue informado a la ciudadanía por la Comisión Nacional del Servicio Civil (CNSC) a través de su página web. A partir del 24 de diciembre de 2020, el Instituto Caro y Cuervo informó a los funcionarios, a través de los canales internos, cada una de las fases del concurso”, enfatizan.

Aseguran que, como toda entidad pública, el Instituto Caro y Cuervo contempla un plan de capacitación anual, con más de treinta sesiones convocadas, para cumplir sus fines institucionales, y este se mantuvo durante el tiempo de desarrollo del concurso.

En cuanto a los trabajadores que podrían quedarse desempleados y están a pocos años de pensionarse, respondieron que “La Ley del Plan Nacional de Desarrollo de 2018 y la CNSC establecen los lineamientos para que las entidades del Estado indiquen quiénes deberían ser considerados como pre-pensionados antes de abrir el concurso. Esta medida, efectivamente, fue tomada por el Instituto para que ello fuera tenido en cuenta en el proceso de convocatoria. El Decreto 1083 de 2015 regula las condiciones en las que las personas deben encontrarse para ser protegidas en el evento de desvinculación por concurso público”.

Finalmente, afirmaron que las directivas del Instituto han compartido las preocupaciones de los funcionarios ante los resultados del concurso y siguen buscando la manera de acompañarlos en esta transición, de forma articulada con el Departamento Administrativo de la Función Pública, el Ministerio del Trabajo, la Comisión Nacional del Servicio Civil y el Ministerio de Cultura.