La interoperabilidad es la capacidad que tienen los dispositivos o sistemas de información para permitir el intercambio y uso de datos de una forma instantánea y segura. Esto permite que las compañías, gracias a la tecnología, puedan conectar a sus diferentes equipos de trabajo en una red de funcionamiento permanente y confiable.
Esta manera de manejar la información cobra particular importancia en el marco de la pandemia de COVID-19, pues según Acrip, más del 98 por ciento de las empresas del país tuvieron que realizar alguna o todas sus labores de forma remota.
Tener tecnología de este tipo les permite a las empresas un manejo más ordenado de su información y una comunicación fluida y efectiva, lo que conlleva a una gestión de los datos más eficaz que impacta el tiempo y la productividad de los equipos.
Esta herramienta es de gran valor para las organizaciones pues les permite reducir problemas comunes como tener diferentes sistemas de información, que funcionen de forma aislada, o contar con información duplicada y redundante, que circule entre diferentes áreas de la compañía.
Establecer sistemas de información interoperables dentro de una misma empresa puede tener algunas ventajas:
Adaptabilidad: los sistemas que contienen la información de la empresa están conectados de forma automática.
Cohesión de los datos: la información de la compañía puede ser gestionada de manera más eficiente, por todas las partes.
Productividad: la interoperabilidad permite que los procesos se desarrollen de manera más ordenada, permitiendo la sincronización de toda la información disponible.
Por sus características, este tipo de sistemas y servicios de comunicación han encontrado un nicho importante en las empresas de transporte y logística, seguridad privada, hotelería o construcción, entre otras, permitiendo un flujo permanente de información entre sus colaboradores en el país.
El Marco Europeo para la Interoperabilidad describe un modelo aplicable a los servicios públicos digitales, que incluye cuatro capas de interoperabilidad: legal, organizacional, semántica y técnica. En esto consisten:
Legal: garantizar que las organizaciones que operan bajo diferentes marcos legales, políticas y estrategias puedan trabajar de manera conjunta.
Organizacional: la forma en que las organizaciones alinean sus procesos para lograr los objetivos en común.
Semántica: asegura que el formato y significado de los datos que se intercambian se conserve y entienda.
Técnica: se refiere a las aplicaciones e infraestructuras que unen los sistemas. Aborda aspectos como especificaciones de interfaz, servicios de interconexión, servicios de integración de datos, presentación e intercambio de datos y protocolos de comunicación seguros.
¿Cómo está Colombia en términos de interoperabilidad?
El miércoles 18 de noviembre, a las 11 a.m., Rafael Fernández Feo, gerente regional de ventas de Motorola, estará como invitado en Dinero Empresarial, para hablar y explicar la interoperabilidad entre dispositivos como tendencia de las comunicaciones empresariales. Conéctese a través de Dinero.com, Semana.com y redes sociales.